La alfombra es uno de los recursos que proporciona calidez y ayuda a ambientar los espacios. La variedad de materiales que podemos encontrar en su elaboración es muy amplia. Sin embargo, el esparto destaca por encima de todos. A continuación, le mostramos los mejores diseños de alfombras de esparto: tipologías y tendencias.
Tienen un encanto inigualable. La calidez de sus tonos y la dureza de sus formas convierten a esta alfombra en un recurso exótico adaptable a cualquier estilo decorativo. Este carácter dual es la explicación de por qué este tipo de alfombras conjugan tan bien en cualquier estancia de la casa.
Las alfombras de esparto son unos de los complementos que más popularidad han ganado en estos últimos años. Probablemente, se deba a la facilidad para combinarlos en diferentes ambientes y estilos, ya sean rústicos o modernos. La versatilidad de este producto se debe al equilibrio perfecto entre artesanía y diseño.
¿Qué es el esparto?
El trabajo del esparto se encajaría dentro de la artesanía tradicional de algunas zonas del Mediterráneo, en concreto de la zona sur de España y del norte de África. Y, aunque este material ha conquistado el mundo del interiorismo, su origen sigue siendo todo un misterio para muchos.
La realidad es que el esparto es acuñado a varias especies de plantas silvestres, y también a las propias fibras obtenidas de estas. Durante siglos, estas plantas han sido muy codiciadas, ya que las fibras naturales obtenidas de ellas son de gran calidad y resistencia, de modo que pueden ser utilizadas para la elaboración de todo tipo de productos: cestería, calzado y alfombras.
En la actualidad, esta tradición ha sobrevivido gracias a la labor de artesanos que siguen trabajando el esparto para realizar creaciones cada vez más interesantes. Por tanto, estamos hablando de un recurso creado y elaborado con las manos.
Las alfombras de esparto, la clave del éxito
El hecho de que las alfombras de esparto se elaboren de manera artesanal las convierte en un elemento único e irrepetible y de gran valor. Posee una serie de cualidades que las convierten en un producto muy demandado por la sociedad.
Esta revalorización de las alfombras se viene dando desde unos años atrás gracias al impulso de interioristas y artistas como Martín Azúa, que han extendido por todo el mundo los beneficios de este material, y, en concreto, de sus alfombras.
Uno de sus beneficios más destacables es la facilidad que tiene este material para aislar la temperatura. A diferencia de otras alfombras de materiales sintéticos, el esparto no transmite sensación de calor. Por eso, es perfecto para climas cálidos y fríos. Por otro lado, debemos tener en cuenta su gran dureza y el carácter ecológico.
Sin embargo, la alfombra de esparto nos ha conquistado por la belleza simple de sus tejidos. Y es justo su sencillez lo que la convierte en un recurso ideal para cualquier estilo, ya sea mediterráneo, raw o, incluso, minimalista.
En cualquiera de estos estilos, la alfombra de esparto nos permite destacar un área de la casa concreta, convirtiéndola en el centro de atención de toda la habitación. Encaja muy bien en los dormitorios, la entrada o una sala de estar.
Cómo decorar con alfombras de esparto
Gracias a su gran versatilidad, la alfombra de esparto es un recurso capaz de combinarse de múltiples formas. Estas son solo algunas de ellas.
Una de las tendencias que más fuerza está ganando es el uso de la alfombra de esparto a modo de moqueta.
La alfombra puede cubrir la superficie de toda la estancia, como si de un segundo suelo se tratase. Esta opción tiene la siguiente ventaja: ayuda a combinar varias texturas al poder incorporar alfombras de otros materiales sobre el esparto.
Las que son de formato redondo son el complemento perfecto para los amantes del estilo boho chic. La esencia artesanal de estas alfombras conjuga a la perfección con el carácter vintage y desenfadado de este estilo.
Otra utilidad que está alcanzando gran popularidad es el uso de estas alfombras a modo de cabecero. La calidad creativa que ofrece el esparto es lo más destacable; hace que estas piezas se conviertan en verdaderas obras de arte. Además, captarán la atención de todas las miradas.
Las alfombras de esparto son unos de los complementos que más popularidad han ganado en estos últimos años. Probablemente, se deba a la facilidad para combinarlos en diferentes ambientes y estilos, ya sean rústicos o modernos. La versatilidad de este producto se debe al equilibrio perfecto entre artesanía y diseño.
¿Qué es el esparto?
El trabajo del esparto se encajaría dentro de la artesanía tradicional de algunas zonas del Mediterráneo, en concreto de la zona sur de España y del norte de África. Y, aunque este material ha conquistado el mundo del interiorismo, su origen sigue siendo todo un misterio para muchos.
La realidad es que el esparto es acuñado a varias especies de plantas silvestres, y también a las propias fibras obtenidas de estas. Durante siglos, estas plantas han sido muy codiciadas, ya que las fibras naturales obtenidas de ellas son de gran calidad y resistencia, de modo que pueden ser utilizadas para la elaboración de todo tipo de productos: cestería, calzado y alfombras.
En la actualidad, esta tradición ha sobrevivido gracias a la labor de artesanos que siguen trabajando el esparto para realizar creaciones cada vez más interesantes. Por tanto, estamos hablando de un recurso creado y elaborado con las manos.
Las alfombras de esparto, la clave del éxito
El hecho de que las alfombras de esparto se elaboren de manera artesanal las convierte en un elemento único e irrepetible y de gran valor. Posee una serie de cualidades que las convierten en un producto muy demandado por la sociedad.
Esta revalorización de las alfombras se viene dando desde unos años atrás gracias al impulso de interioristas y artistas como Martín Azúa, que han extendido por todo el mundo los beneficios de este material, y, en concreto, de sus alfombras.
Uno de sus beneficios más destacables es la facilidad que tiene este material para aislar la temperatura. A diferencia de otras alfombras de materiales sintéticos, el esparto no transmite sensación de calor. Por eso, es perfecto para climas cálidos y fríos. Por otro lado, debemos tener en cuenta su gran dureza y el carácter ecológico.
Sin embargo, la alfombra de esparto nos ha conquistado por la belleza simple de sus tejidos. Y es justo su sencillez lo que la convierte en un recurso ideal para cualquier estilo, ya sea mediterráneo, raw o, incluso, minimalista.
En cualquiera de estos estilos, la alfombra de esparto nos permite destacar un área de la casa concreta, convirtiéndola en el centro de atención de toda la habitación. Encaja muy bien en los dormitorios, la entrada o una sala de estar.
Cómo decorar con alfombras de esparto
Gracias a su gran versatilidad, la alfombra de esparto es un recurso capaz de combinarse de múltiples formas. Estas son solo algunas de ellas.
Una de las tendencias que más fuerza está ganando es el uso de la alfombra de esparto a modo de moqueta.
La alfombra puede cubrir la superficie de toda la estancia, como si de un segundo suelo se tratase. Esta opción tiene la siguiente ventaja: ayuda a combinar varias texturas al poder incorporar alfombras de otros materiales sobre el esparto.
Las que son de formato redondo son el complemento perfecto para los amantes del estilo boho chic. La esencia artesanal de estas alfombras conjuga a la perfección con el carácter vintage y desenfadado de este estilo.
Otra utilidad que está alcanzando gran popularidad es el uso de estas alfombras a modo de cabecero. La calidad creativa que ofrece el esparto es lo más destacable; hace que estas piezas se conviertan en verdaderas obras de arte. Además, captarán la atención de todas las miradas.
Vía: midecoración
No hay comentarios:
Publicar un comentario