lunes, 26 de noviembre de 2018

Bancos bajo ventana

¿Verdad que no hay mayor placer que sentarse cómodamente una mañana de sol junto a la ventana a leer, contar nubes o cerrar los ojos y pensar en la nada? Hoy le queremos dedicar el post a uno de los caprichos más habituales de aquellos que disponen de una casa con un gran ventanal: los bancos bajo ventana.
En realidad, en la mayoría de los casos no se trata de una mueble auxiliar sin más que pueda comprarse en una tienda, sino que suelen hacerse a medida, bien de obra o con carpintería.

Bancos de obra

Son los más habituales y suelen fabricarse de obra a la vez que se hace una reforma en casa. En estos casos se crea en la zona inferior una estructura de ladrillo o pladur revestido con el acabado de la pared (normalmente pintura) de modo que el banco queda perfectamente integrado en el ambiente, como si formara parte de la construcción.
Tienen la ventaja de su mimetismo con el resto de la obra, aunque a cambio pierden la oportunidad de aprovechar el hueco de debajo para almacenaje.

Bancos con hueco visto

Son también de obra, pero incluyen huecos debajo para almacenaje, por lo que la estética cambia un poco (siguen integrados en la construcción pero ya se perciben como elemento distinto). Lo más habitual es que los huecos se rellenen con cestas iguales en las que almacenar diversos enseres.

Bancos con cajones

Este tipo de bancos bajo la ventana suelen ser casi todos de carpintería, e incorporan grandes cajones a modo de gaveteros para guardar cojines, mantas u otras cosas que no se quiera tener a la vista. Pueden servir hasta de zapatero.

Bancos con puertas
Al igual que los anteriores, estos bancos incorporan módulos de almacenaje hechos a medida por ebanistas para su aprovechamiento interior. Sin embargo, en lugar de cajones incorporan armaritos con puertas batientes, lo cual abarata el presupuesto aunque a cambio de una mayor incomodidad, pues habrá que agacharse más para acceder a su interior. Por este motivo suelen ser menos comunes.

Otros tipos de bancada
Finalmente, dentro de los bancos de carpintería encontramos esta tipología que se parece a los bancos de obra con la diferencia de que su estructura o frente se elabora en madera o DM lacado y no en yeso o ladrillo pintado.

No son muy comunes porque se pierde espacio de almacenaje debajo, pero a veces se recurre a ellos para “revestir” un banco de obra que no quiera dejarse simplemente pintado.
También encontramos otras opciones como los bancos volados, que van sin estructura inferior dejando todo el hueco de debajo libre. Al tener que soportar peso, suelen tener algún tipo de soporte debajo, ya sea de tipo escuadra o con estructura metálica inferior de muro a muro.

Bancos entre muros

A la hora de determinar el tipo de banco que vamos a poner, el ventanal y el espacio que deje hasta los muros laterales influirá en su configuración. De este modo, lo más habitual es encontrarnos con bancos que se levantan en el espacio que dejan los dos muros laterales al ventanal.

Bancos entre estanterías

Sin embargo, cuando el hueco entre el ventanal y la pared lateral es lo suficientemente espacioso, un recurso muy empleado es llenarlo con estanterías a las que se acceda lateralmente, de modo que complementen al banco en sí generando un espacio de lectura digno del lector más empedernido.
Lo que no cabe duda es que sean como sean, los bancos bajo la ventana suelen ser el rincón favorito de la casa para todos los que en ella habitan. Todo un pequeño lujo desde el que relajarnos al llegar a casa.

Vía: Decofilia















No hay comentarios:

Publicar un comentario