¿Cuáles son las principales virtudes de los tejados de pizarra?
Ya le hemos avanzado algunas de las ventajas de poner tejados de pizarra, entre las que destacan su agradable estética y su contribución a la hora de mejorar el aislamiento de su vivienda, evitando filtraciones y ayudando, además, a ahorrar en las facturas de la calefacción. Asimismo, se trata de un material muy empleado tradicionalmente en construcción, motivo por el cual nos ofrece seguridad, pues la experiencia tiene una gran valor cuando nos referimos a cuestiones constructivas.
Otra ventaja considerable de la pizarra es su versatilidad. Así pues, podemos encontrarla en interiores y exteriores, cubriendo muros o tejados, y actuando como un elemento fundamental en tipologías tan diferentes como refugios de montañas o chalets de diseño. Por otro lado, tanto la instalación como el posterior mantenimiento resultan bastante sencillos.
¿Cómo se asienta un tejado de pizarra?
En el diseño de una cubierta de pizarra influyen básicamente tres aspectos: el formato de las piezas, la inclinación del tejado y la situación geográfica. Los tejados de pizarra se forman a base de placas planas e independientes, las cuales se colocan cubriendo parcialmente la pieza inferior y creando filas horizontales. Las placas cuentan con un borde abiselado que queda colocado hacia el exterior, para facilitar así el vertido del agua y una mejor resistencia al viento.
Las placas de pizarra tienen tres partes:
El solape. Es la parte superior, la que no recibe agua. Esta debe tener una dimensión apropiada para evitar que el agua llegue a la sección superior, ya sea por capilaridad o por la acción del viento.
Parte semioculta. Es la zona intermedia, la que permanece cubierta parcialmente por la placa superior.
Parte vista. Se corresponde con la zona inferior de la placa, y recibe el agua directa de la lluvia y la que cae de las piezas superiores. También es relevante cuidar la proporción de placa que queda a la vista, ya que de ello dependerá que el agua, en lugar de dirigirse hacia abajo, se deslice lateralmente.
Por otro lado, a la hora de asentar la pizarra en la estructura del tejado, contamos con dos posibilidades:
Faldones clavables. Se suelen realizar con entarimados y/o rastrelados de madera o mortero, empleándose también el yeso en las zonas más secas. En estos casos, la pizarra se clava y, por tanto, se garantiza una correcta fijación. No obstante, para ello es necesario contar con una pendiente superior a 30 grados.
Faldones no clavables. Pueden ser de forjado o chapa metálica, y sobre ellos se colocan rastrelados horizontales, o bien verticales y horizontales.
En cuanto a la sujeción de las placas de pizarra, esta se realiza con ganchos metálicos de un grosor comprendido entre 2,5 y 3,5 milímetros, utilizándose chapas de plomo, cobre o zinc para rematar las zonas de conexión entre la cubierta y las paredes.
¿Por qué debemos confiar en un profesional para la instalación o reparación de tejados de pizarra?
Si bien la colocación de las placas de pizarra no es demasiado compleja, conviene confiar esta tarea a un profesional, pues este garantizará que la instalación se realice correctamente y, con ello, que el tejado sea totalmente estanco. Además, debe tener en cuenta que no todas las estructuras pueden sostener el peso de determinados tipos de pizarra. Así pues, lo más inteligente es ponerse en manos de un profesional, ya que de esta manera nos aseguraremos un resultado de calidad y evitaremos posibles problemas posteriores.
¿Cómo se asienta un tejado de pizarra?
En el diseño de una cubierta de pizarra influyen básicamente tres aspectos: el formato de las piezas, la inclinación del tejado y la situación geográfica. Los tejados de pizarra se forman a base de placas planas e independientes, las cuales se colocan cubriendo parcialmente la pieza inferior y creando filas horizontales. Las placas cuentan con un borde abiselado que queda colocado hacia el exterior, para facilitar así el vertido del agua y una mejor resistencia al viento.
Las placas de pizarra tienen tres partes:
El solape. Es la parte superior, la que no recibe agua. Esta debe tener una dimensión apropiada para evitar que el agua llegue a la sección superior, ya sea por capilaridad o por la acción del viento.
Parte semioculta. Es la zona intermedia, la que permanece cubierta parcialmente por la placa superior.
Parte vista. Se corresponde con la zona inferior de la placa, y recibe el agua directa de la lluvia y la que cae de las piezas superiores. También es relevante cuidar la proporción de placa que queda a la vista, ya que de ello dependerá que el agua, en lugar de dirigirse hacia abajo, se deslice lateralmente.
Por otro lado, a la hora de asentar la pizarra en la estructura del tejado, contamos con dos posibilidades:
Faldones clavables. Se suelen realizar con entarimados y/o rastrelados de madera o mortero, empleándose también el yeso en las zonas más secas. En estos casos, la pizarra se clava y, por tanto, se garantiza una correcta fijación. No obstante, para ello es necesario contar con una pendiente superior a 30 grados.
Faldones no clavables. Pueden ser de forjado o chapa metálica, y sobre ellos se colocan rastrelados horizontales, o bien verticales y horizontales.
En cuanto a la sujeción de las placas de pizarra, esta se realiza con ganchos metálicos de un grosor comprendido entre 2,5 y 3,5 milímetros, utilizándose chapas de plomo, cobre o zinc para rematar las zonas de conexión entre la cubierta y las paredes.
¿Por qué debemos confiar en un profesional para la instalación o reparación de tejados de pizarra?
Si bien la colocación de las placas de pizarra no es demasiado compleja, conviene confiar esta tarea a un profesional, pues este garantizará que la instalación se realice correctamente y, con ello, que el tejado sea totalmente estanco. Además, debe tener en cuenta que no todas las estructuras pueden sostener el peso de determinados tipos de pizarra. Así pues, lo más inteligente es ponerse en manos de un profesional, ya que de esta manera nos aseguraremos un resultado de calidad y evitaremos posibles problemas posteriores.
Vía: Blog Plan Reforma
No hay comentarios:
Publicar un comentario