Cristina Celestino, la famosa diseñadora y arquitecta de estilo inconfundible, fue llamada a pensar y diseñar un interior que estuviese en continuidad con la idea que los clientes asociaban con 28 Posti, un lugar que está impregnado de una identidad establecida, pero que de alguna manera sigue evolucionando.
La materialidad, la textura o el color (a menudo tono sobre tono) son sin duda los conceptos en los que se basa la intervención de la diseñadora para 28 Posti, haciendo uso de la gama de productos de Fornace Brioni y Matteo Brioni. La paleta de colores identificada se corresponde con materiales naturales: madera en diferentes acabados, terracota de Fornace Brioni, hierro encerado natural al que se le agrega un color azul saturado y un color tierra, además del blanco tiza de las paredes longitudinales.
El techo alterna vigas de madera originales y restauradas con fondos azules claros desaturados. La boiserie de terracota Giulio Romano de la colección Gonzaga de Fornace Brioni cubre las paredes de los lados cortos, junto con el yeso de barro sin cocer de Matteo Brioni que llega al techo, mientras que en el centro de la habitación el tabique original de ladrillo sigue siendo el protagonista. La pared que separa la cocina también se trata con un yeso natural a base de tierra.
En la segunda sala, se coloca un cómodo banco tapizado contra la pared del fondo, mientras que las mesas han sido rediseñadas para completar el espacio renovado, combinadas con las sillas Fratina de Billiani, seleccionadas por el arquitecto.
La iluminación es proporcionada por lámparas de suspensión en chapa microperforada de la empresa española Arturo Alvarez, que son tan livianas como el papel y que luego muestran una materialidad y una mano de obra precisa para el ojo atento.
Para más información visiten: Cristina Celestino
Vía: Decoesfera
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