Bancos tapizados

Los bancos son un tipo de mueble que tiene cabida en toda clase de decoración, así como en casi cualquier lugar de la casa. Podemos verlos en la cocina como asiento de apoyo, en el jardín, terraza, salón, recibidor, etc. Un banco tapizado queda bien en cualquier sitio, siempre y cuando lo sepamos combinar.

Las posibilidades de un banco tapizado.

Podemos encontrarlos de madera, de PVC, de metal, mimbre… un banco tapizado es un elemento ecléctico que, además, sabrá resistir al paso del tiempo y las modas. Dependiendo del estilo, tamaño y necesidades lo colocaremos en diferentes espacios de la casa. Por ejemplo, un banco tapizado de patas isabelinas en blanco y con una tapicería con detalles pastel, será el complemento ideal para los pies de la cama de una habitación de estilo romántico chic. Si tiene un gran salón de estilo industrial, coloque un banco con patas metálicas tapizado en cuero marrón oscuro. Ponga un gran reloj de engranajes colgado en esa misma pared y tendrá resuelta la decoración de la zona con dos elementos básicos.

DIY ¡Hágalo usted mismo!: Recicle un banco tapizado.

Para las personas creativas es irresistible e inevitable dar nueva vida a los muebles. Y un banco tapizado es una de las piezas más agradecidas en este sentido. Con apenas una lata de pintura y algunos metros de tela se pueden conseguir verdaderas obras de arte. Un banco tapizado con tela animal print puede convertirse en su mejor amigo si busca una decoración exótica de toques africanos. Si le gusta el estilo vintage, también lo tiene fácil: basta con pintar su banco tapizado en algún color vivo y lijarlo para darle apariencia desgastada. Luego podrá colocarlo en el salón, cocina o terraza. ¡Quedará bien en cualquier sitio!.

Coloque su banco tapizado bajo una ventana y acompáñelo con cojines. Creará un pequeño rincón de lectura con mucho encanto.
Busque unas cestas de rejilla que quepan bajo su banco tapizado y píntelas a juego. Tendrá almacenaje extra de una forma fácil y original.

Vía: Westwing