En algunos centros de bricolaje (y también en tiendas online) disponen de rodapiés especialmente preparados para esconder las canalizaciones eléctricas, de antena o de teléfono, de manera que no tengamos que hacer rozas en la pared o pegar esas canaletas tan poco atractivas.
Con distintas alturas
Como pueden ver en la primera fotografía, existen zócalos y piezas de diferentes alturas para poder adaptarse a todos los gustos y estilos. Estas piezas, que suelen ser de DM, madera o plástico, llevan unas canalizaciones internas que organizan los cables y nos proporcionan total seguridad. El modelo de la imagen tiene una canaleta que se atornilla a la pared y luego se cubre con el rodapié en sí, pero también los hay en una sola pieza que cuenta con dos o tres canales en su interior. Estas soluciones, además, van siempre acompañadas de distintos accesorios como codos, cajas de conexión o tomas de enchufe.
Clásico y con molduras
En la segunda imagen les muestro una solución muy atractiva y clásica: un rodapié historiado con molduras, realizado en madera y de estilo clásico. Las tomas de corriente que incluye quedan muy bien integradas en el zócalo. Si no encuentran este tipo de diseño, los más “manitas” pueden construir su propio zócalo similar con tableros de madera o DM, molduras decorativas y esmalte-laca satinado. Una ingletadora les ayudará a cortar las piezas a bisel para hacer las esquinas, pero también pueden llevar las medidas de las piezas al centro de bricolaje y pedir que les hagan los cortes pagando un poco más. El resultado será perfecto y la inversión merecerá la pena.
Vía: Decorablog
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