En el que originalmente era un taller de reparación de automóviles, la firma de arquitectura local Ivy Studio ha creado un moderno bar-restaurante. Un espacio que encaja perfectamente con el carácter relajado y artístico de los vecinos. En él, la estética tropical convive con el carácter industrial de las vigas de acero vistas.
“La idea inicial consistió en imaginar un restaurante de temática tropical”, explican los arquitectos. El propietario acudió a ellos con un deseo muy claro: quería una decoración independiente del entorno y un ambiente particularmente cálido.
Interiorismo tropical
Dividido en distintas zonas, el local ofrece a los visitantes espacios donde comer o beber. Una barra adornada con taburetes de color rosa y exuberante vegetación colgada sobre ella preside el espacio.
Diferentes texturas y colores, así como una gran cantidad de plantas construyen el espacio. El tono rosa-lima del yeso que envuelve el espacio combina a la perfección con materiales más orgánicos, como la madera teñida de negro.
Los espejos retroiluminados ahumados recrean una puesta de sol, generando una suave iluminación ambiente. Un interesante juego de reflejos permite a los visitantes experimentar el espacio desde muy distintos puntos de vista.
Diseño integral
El equipo de Ivy Studio ha participado también en el diseño y producción del mobiliario. Con sede en la ciudad canadiense de Montreal, la firma trabaja a escalas muy diversas. Desde edificios residenciales y comerciales a gran escala, hasta el diseño de mobiliario.
“Experimentamos constantemente con nuevas formas y materiales, para redefinir así la relación entre el espacio y su usuario” cuentan los arquitectos. “Se trata de que cada proyecto muestre su singularidad dentro de su entorno”, añaden.
Fotografía: Jack Jerome
Dividido en distintas zonas, el local ofrece a los visitantes espacios donde comer o beber. Una barra adornada con taburetes de color rosa y exuberante vegetación colgada sobre ella preside el espacio.
Diferentes texturas y colores, así como una gran cantidad de plantas construyen el espacio. El tono rosa-lima del yeso que envuelve el espacio combina a la perfección con materiales más orgánicos, como la madera teñida de negro.
Los espejos retroiluminados ahumados recrean una puesta de sol, generando una suave iluminación ambiente. Un interesante juego de reflejos permite a los visitantes experimentar el espacio desde muy distintos puntos de vista.
Diseño integral
El equipo de Ivy Studio ha participado también en el diseño y producción del mobiliario. Con sede en la ciudad canadiense de Montreal, la firma trabaja a escalas muy diversas. Desde edificios residenciales y comerciales a gran escala, hasta el diseño de mobiliario.
“Experimentamos constantemente con nuevas formas y materiales, para redefinir así la relación entre el espacio y su usuario” cuentan los arquitectos. “Se trata de que cada proyecto muestre su singularidad dentro de su entorno”, añaden.
Fotografía: Jack Jerome
Para más información visiten: Ivystudio
Vía: diariodesign
No hay comentarios:
Publicar un comentario