sábado, 23 de febrero de 2019

Apartamento en Hong Kong con delicados interiores por Bean Buro

El estudio franco-chino Bean Buro se inspiró en las vistas de la naturaleza circundante para diseñar el interior de este apartamento definido por suaves líneas curvas y tonos pastel. La vivienda de 230 m², que pertenece a un matrimonio con dos hijos, se encuentra en Picadilly Mansion, un edificio de apartamentos de 20 plantas, construido en Hong Kong, en 1967. El apartamento cuenta con un comedor y sala de estar con impresionantes vistas a la naturaleza, un dormitorio principal, un dormitorio para la hija, que vive en la casa, y otro para el hijo, que estudia arquitectura en Reino Unido.
Vistas que inspiran.
Explican los arquitectos Kenny Kinugasa-Tsui y Lorène Faure que el interiorismo se “inspiró en las vistas circundantes, donde las suaves curvas de la naturaleza se traducen en el lenguaje arquitectónico interior”. Columna vertebral de este diseño es un “río circulatorio” materializado, principalmente, en el suelo de terrazo. Este material se extiende desde el vestíbulo hasta el fondo de la cocina, que puede cerrarse mediante puertas de cristal correderas, pasando por parte de la sala de estar y el comedor, y una habitación de almacenaje. También en el suelo del baño del dormitorio principal y en el de invitados se ha utilizado este tipo de pavimento.
Río de terrazo.
“El concepto de ‘río’, representado en el suelo de terrazo, es una estrategia de circulación que genera un suave flujo a través de los espacios sociales abiertos mientras articula volúmenes arquitectónicos a lo largo de su ruta para crear espacios privados”, comenta Kenny Kinugasa-Tsui. Además, varios nichos expositivos permiten a los propietarios personalizar su hogar, ya sea exponiendo las antigüedades chinas del padre o la colección de Nanoblock de los hijos. Para resaltar estos objetos se utilizan tiras de luces LED ocultas.
En el inicio de este recorrido, los huéspedes son recibidos por un acogedor vestíbulo forrado en cuero marrón, que contrasta intensamente con el luminoso salón comedor y conduce de forma natural hacia el balcón, desde donde se disfruta de la imagen de la ciudad de Hong Kong.
La habitación de la hija fue diseñada con elegancia y feminidad, utilizando estantes de mármol y dos apliques en el mismo material sobre la cama para aportar un sutil toque de lujo. La habitación del hijo cuenta con una escultural cápsula de madera: una unidad que integra descanso, almacenaje y entretenimiento. La cama adopta la forma de una plataforma elevada dentro del volumen de madera, con la televisión instalada en un nivel bajo para que la habitación se pueda transformar en un área de entretenimiento con un sofá. Además, dispone de una zona de estudio que puede compartirse con la de los padres, pudiéndose también independizar mediante puertas correderas.
Delicada calidez.
En todo el apartamento, se respira un ambiente cálido y delicado, con una paleta de materiales en tonos neutros rosas y grises que se equilibran con la calidez del cuero natural marrón, el suelo de madera clara y los acentos de cobre de los herrajes. “Para conseguir un tono de lujo pero fresco, compusimos cuidadosamente una paleta de materiales utilizando cuero, terrazo, metal, madera y pintura de colores suaves. La sensación general es simple y elegante”, explica Lorène Faure.

Para más información visiten: Bean Buro

















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