Los arquitectos Lorène Faure y Kenny Kinusaga-Tsui se enfrentaron a la tarea de restaurar este apartamento de 149 m² para una familia joven con dos hijos que, provenientes de Oxford, se iban a instalar en el área residencial de Pok Fu Lam (Hong Kong) para mejorar su calidad de vida.
La familia necesitaba un dormitorio principal, una sala de estudio para el padre, que es cirujano y tiene muchos libros y archivos, y una habitación que se pudiera transformar en una habitación para bebés. Además, se necesitaba acomodar un piano de media cola en la sala de estar para que los padres lo tocaran mientras disfrutaban de las vistas al océano.
El diseño de Bean Buro se inspiró en una cascada cercana a Pok Fu Lam. La idea del agua que fluye continuamente y la forma que adopta por la topografía de las rocas naturales se convirtieron en una metáfora de dos elementos yuxtapuestos. El primero es un volumen curvilíneo en tonos azules que comienza como una estantería en el salón y fluye hacia el dormitorio principal, formando un volumen de almacenamiento con un nicho de asiento. Este volumen oculta la habitación de los niños y la de los invitados.
El segundo elemento es un volumen de hormigón gris rectilíneo que empieza en el vestíbulo, constituyendo el telón de fondo de la zona del comedor, y sigue hacia el dormitorio principal mientras oculta el aseo de invitados, un espacio de almacenaje y una sala de estudio con el dormitorio principal. El resultado es una composición que permite que los espacios al fondo de la vivienda estén conectados con la entrada y la cocina, formando un ambiente abierto.
Privacidad para los adultos.
Con el fin de crear privacidad para los padres, una puerta corredera de bolsillo, que se puede “extraer” del volumen de hormigón, sirve para separar el dormitorio principal y la sala de estudio del resto del apartamento. Esta puerta está preparada acústicamente para garantizar que el ruido de los juegos infantiles no moleste al padre en su estudio. Para aumentar aún más la privacidad del despacho, se ha creado una puerta corredera adicional para separar esta estancia del dormitorio de los adultos.
Los paneles de hormigón utilizados en el proyecto fueron prefabricados en Francia y ayudaron a reducir el tiempo de construcción ya que podían cortarse y ensamblarse fácilmente in situ. Una larga tira de luz LED continua acentúa los paneles de hormigón.
El pavimento del piso es una baldosa de cerámica con una textura de madera, que es resistente pero proporciona calidez visual al espacio. Las baldosas también forman el acabado de la pared en la zona del comedor, creando un ambiente confortable con una luz de suspensión y una mesa extensible para acoger entre seis y diez personas.
En la habitación de los niños y la de invitados se ha incorporado un laminado de pizarra de alta calidad sobre el que se puede escribir. Por último, la sala de estudio tiene una gran capacidad de almacenamiento para libros y archivos, así como un escritorio hecho a medida. Una superficie magnética en la que se puede escribir está integrada en las paredes blancas de esta habitación.
Para más información visiten: Bean Buro
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