Vamos a ver qué es este concepto de bioconstrucción, en qué consisten estas casas ecológicas y por qué son una buena idea en la cual invertir en caso de que estemos buscando inspiración para hacer una casa. Los modelos actuales son realmente funcionales y cuentan con una estupenda estética.
Qué es una bioconstrucción
Una bioconstrucción es una edificación, establecimiento o vivienda que se ha construido utilizando materiales que no son perjudiciales para el medio ambiente ni cuentan con elementos tóxicos para personas o para la naturaleza. Como podemos imaginarnos, este tipo de construcciones utilizan materiales reciclados, ecológicos, naturales e incluso de origen vegetal o que son biocompatibles, para evitar el daño al medio ambiente o a las personas. Es una de las opciones más sostenibles a la hora de construir cualquier espacio, eligiendo entre los muchos materiales que hay en la actualidad que son compatibles con el medio ambiente.
Por qué escoger una bioconstrucción
Escoger los materiales naturales en una vivienda no disminuye la calidad final de esta, ya que en la actualidad hay todo tipo de materiales y formas de trabajar con ellos. Tampoco hay que renunciar a ninguna comodidad, pues las bioconstrucciones actuales son muy completas. Este tipo de edificaciones tienen la gran ventaja de ser respetuosas con el medio ambiente y buscar el menor impacto de forma integral, es decir desde todos los puntos de vista de una casa, no solo centrándose en los materiales. Así nos aseguraremos de que nuestro hogar es totalmente adecuado para el medio ambiente.
Tipos de materiales utilizados
En las bioconstrucciones actuales hay un gran catálogo de materiales a elegir. Eso sí, se deben escoger profesionales que sepan trabajar con ellos para que el resultado sea óptimo, de hecho ya hay empresas que trabajan realizando exclusivamente este tipo de casas. Con estos y otros materiales se pueden conseguir casas sostenibles y con todo lujo de detalles.
En estas casas se pueden utilizar todo tipo de materiales reciclados que vengan del vidrio o el papel. Para la estructura se pueden utilizar adobes, que son mezclas de arcillas, piedra, bloques de tierra prensada, madera o incluso balas de paja en bloques que se recubren de una pasta.
Para los aislamientos en el hogar se usan otros materiales naturales tales como las fibras de origen vegetal como la fibra de coco, la celulosa, el corcho o la fibra de madera. La lana de oveja también es un aislamiento pero de origen animal. Los de origen mineral son la arcilla, perlita o vermiculita.
La bioconstrucción no se limita a utilizar materiales ecológicos en las construcciones, sino que además tiene en cuenta el entorno en el cual se deben integrar, por eso se han creado una serie de principios para este tipo de edificaciones. La ubicación es uno de los más importantes, ya que hay que escoger un lugar en el cual nos encontremos lejos de fuentes que puedan llegar a ser tóxicas. De nada sirve hacer una casa bio si nos encontramos en un lugar que dañará nuestra salud. Es decir, que hay que alejarse de lugares cercanos a fábricas en donde hay contaminación del aire o del agua, de fuentes de radiaciones o de tendidos eléctricos y transformadores.
En la bioconstrucción también se busca la integración con el entorno. No hace tantos años las casas se fabricaban con los materiales disponibles en cada zona, de ahí que viésemos lugares con casas de piedra y con techos de pizarra o incluso de paja. En la actualidad este también es un tema importante, ya que utilizar los recursos locales minimiza el impacto en el medio ambiente a la hora de hacer la casa.
Se debe pensar previamente la orientación y cómo se va a construir la estructura para conseguir el mejor aprovechamiento de la luz natural y de las posibilidades del terreno. Hay en casas en las que incluso usan la energía geotérmica para conseguir recursos como el agua caliente. En cada caso debe contratarse a un experto para que analice cuáles son las posibilidades de la zona, sus ventajas y desventajas, para poder sacarle el mayor partido posible a la nueva construcción. Desde utilizar la acumulación de aguas en lugares con vetas o con muchas lluvias a poner paneles solares para aprovechar este tipo de energía.
Tipo de energía
Una vez sepamos qué tipo de entorno tenemos podremos saber qué energía usaremos para que nuestro hogar sea más ecológico. En este caso se puede escoger entre la energía solar con paneles, la energía geotérmica, la biomasa de residuos forestales, la hidráulica o la eólica.
Por qué escoger una bioconstrucción
Escoger los materiales naturales en una vivienda no disminuye la calidad final de esta, ya que en la actualidad hay todo tipo de materiales y formas de trabajar con ellos. Tampoco hay que renunciar a ninguna comodidad, pues las bioconstrucciones actuales son muy completas. Este tipo de edificaciones tienen la gran ventaja de ser respetuosas con el medio ambiente y buscar el menor impacto de forma integral, es decir desde todos los puntos de vista de una casa, no solo centrándose en los materiales. Así nos aseguraremos de que nuestro hogar es totalmente adecuado para el medio ambiente.
Tipos de materiales utilizados
En las bioconstrucciones actuales hay un gran catálogo de materiales a elegir. Eso sí, se deben escoger profesionales que sepan trabajar con ellos para que el resultado sea óptimo, de hecho ya hay empresas que trabajan realizando exclusivamente este tipo de casas. Con estos y otros materiales se pueden conseguir casas sostenibles y con todo lujo de detalles.
En estas casas se pueden utilizar todo tipo de materiales reciclados que vengan del vidrio o el papel. Para la estructura se pueden utilizar adobes, que son mezclas de arcillas, piedra, bloques de tierra prensada, madera o incluso balas de paja en bloques que se recubren de una pasta.
Para los aislamientos en el hogar se usan otros materiales naturales tales como las fibras de origen vegetal como la fibra de coco, la celulosa, el corcho o la fibra de madera. La lana de oveja también es un aislamiento pero de origen animal. Los de origen mineral son la arcilla, perlita o vermiculita.
Vía: decoora
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