Para su dueño, Omar Shabaan, este restaurante supone un sueño perseguido durante muchos años. Pese a copresidir un pequeño imperio de restaurantes, locales y hasta un hotel boutique en Londres, no se ha dado por satisfecho hasta poder ver cumplido su sueño.
El local elegido fue un pub en desuso ubicado en la esquina entre Hugh y Cambridge Street. El edificio en cuestión es de estilo Victoriano y cuenta con cuatro pisos.
Y para llevar a cabo la transformación, el estudio elegido fue Sella Concept, cuyos diseñadores se encargaron de llevar la costa mediterránea al mismísimo Londres.
Con un chef Mallorquín entre los fogones, sólo faltaba llevar al interior del local la costa en la que pasa gran parte de su tiempo. Impregnar el interior del sol y el mar mediterráneo con un toque de sofisticación, con el fin de crear imagen de marca.
El resultado ha sido una estallido de colores terrosos, acabados dorados y toques azul de mar.
A continuación les detallamos los puntos más destacables de esta decoración mediterránea:
Iluminación
Si una de las premisas era llevar la luz del Mediterráneo al interior de cuatro paredes, sin duda el reto era importante. Sin embargo, los diseñadores han sabido superar la prueba, ya que incluso en los días más grises de Londres, el interior se percibe luminoso y alegre.
Además de la luz general, una serie de apliques de lo más sofisticado, hechos con una tira de led que cuelga de un soporte circular, iluminan puntualmente paredes, haciéndolas mucho más acogedoras.
Sobre la barra, se salpican una serie de lámparas colgantes de diversas formas, aportando dinamismo al conjunto.
Revestimiento de las paredes y suelo
Sin duda, uno de los aspectos que más llama la atención es el color terroso de las paredes y el suelo. Junto con las esquinas redondeadas de cada rincón del establecimiento, se crea un contenedor envolvente que hace sentir a los comensales casi como en el interior de una cueva.
Uso de terrazo
Siguiendo el precepto de obviar la línea recta para ensalzar la curva, la barra ondulante se presenta como una ola en mitad del local. Con su acabado de terrazo en tonos azules a juego con el sobre de las mesas, ya tenemos nuestro mar presente en la decoración del restaurante.
Tapizado de los asientos
A pesar de tener mesas y barras azuladas, no podía faltar un tono más intenso de este bonito color. De esta manera, vemos como el tapizado del respaldo de los taburetes, del asiento de las sillas y de los sillones, cobra especial importancia para conseguir una decoración mediterránea.
Toques dorados
Y para terminar, tenemos la luz del sol que no podía estar mejor representada que con destellos dorados. Los vemos en las patas de las mesas, en el zócalo de los bancos corridos, en las rejillas de ventilación, en los sillones, en las baldas de la trasbarra, en las lámparas y hasta en la grifería del baño.
Iluminación
Si una de las premisas era llevar la luz del Mediterráneo al interior de cuatro paredes, sin duda el reto era importante. Sin embargo, los diseñadores han sabido superar la prueba, ya que incluso en los días más grises de Londres, el interior se percibe luminoso y alegre.
Además de la luz general, una serie de apliques de lo más sofisticado, hechos con una tira de led que cuelga de un soporte circular, iluminan puntualmente paredes, haciéndolas mucho más acogedoras.
Sobre la barra, se salpican una serie de lámparas colgantes de diversas formas, aportando dinamismo al conjunto.
Revestimiento de las paredes y suelo
Sin duda, uno de los aspectos que más llama la atención es el color terroso de las paredes y el suelo. Junto con las esquinas redondeadas de cada rincón del establecimiento, se crea un contenedor envolvente que hace sentir a los comensales casi como en el interior de una cueva.
Uso de terrazo
Siguiendo el precepto de obviar la línea recta para ensalzar la curva, la barra ondulante se presenta como una ola en mitad del local. Con su acabado de terrazo en tonos azules a juego con el sobre de las mesas, ya tenemos nuestro mar presente en la decoración del restaurante.
Tapizado de los asientos
A pesar de tener mesas y barras azuladas, no podía faltar un tono más intenso de este bonito color. De esta manera, vemos como el tapizado del respaldo de los taburetes, del asiento de las sillas y de los sillones, cobra especial importancia para conseguir una decoración mediterránea.
Toques dorados
Y para terminar, tenemos la luz del sol que no podía estar mejor representada que con destellos dorados. Los vemos en las patas de las mesas, en el zócalo de los bancos corridos, en las rejillas de ventilación, en los sillones, en las baldas de la trasbarra, en las lámparas y hasta en la grifería del baño.
Para más información visiten: Sella Concept
Vía: Decofilia
No hay comentarios:
Publicar un comentario