Para los profanos en la materia, diremos que la entrada de frío al interior a través de la fachada es muy común en las viviendas antiguas, donde no se contaba con los medios de aislamiento que tenemos en la actualidad, porque no es solo aislar nuestra fachada, que esto es primordial e indispensable, aunque también hay que decir que todas las viviendas construidas desde hace treinta años, cuentan con un aislamiento medianamente adecuado, y en construcciones nuevas a las que ya les afecta el Código Técnico de la Edificación, pues eso está garantizado.
Porque el mayor punto de pérdida y alteración de la temperatura de una vivienda, es por supuesto los huecos de luz, es decir las ventanas, y por razones obvias muy fáciles de entender por cualquiera. Y esto se produce porque es el punto donde en mayor medida se da el Puente Térmico, que no es otra cosa y para explicarlo fácil, que el propio material de que está compuesta esta ventana transmite fácilmente la temperatura del exterior al interior por una variación de la superficie aislante y resistencia térmica.
Es decir si tenemos nuestra fachada aislada y colocamos una ventana de aluminio simple, nos cerrará el hueco, pero estará transmitiendo la temperatura exterior al interior a través del propio material de aluminio.
Y, ¿Cómo corregimos esto?
De un modo muy fácil, colocando ventanas realizadas con un perfil de Rotura de Puente Térmico y por supuesto vidrios con cámara, de los llamados “Climalit”. Hay materiales como la madera y el PVC que en mayor o menor medida ya hacen por sí solos la Rotura de Puente Térmico, sin embargo el aluminio y el acero, son transmisores de temperatura, por lo tanto hay que romper esa cualidad.
Y, ¿Cómo corregimos esto?
De un modo muy fácil, colocando ventanas realizadas con un perfil de Rotura de Puente Térmico y por supuesto vidrios con cámara, de los llamados “Climalit”. Hay materiales como la madera y el PVC que en mayor o menor medida ya hacen por sí solos la Rotura de Puente Térmico, sin embargo el aluminio y el acero, son transmisores de temperatura, por lo tanto hay que romper esa cualidad.
Para conseguir esto, se fabrican los perfiles con el sistema de RPT es decir Rotura de Puente Térmico, que consiste en incorporar al perfil unas bandas de poliamida u otros materiales que impiden la transmisión térmica porque dividen con aislante el perfil exterior del perfil interior, (véase la imagen). Además de esto, es importante colocar un buen vidrio doble con cámara de aire, que hace su función aislante unida a la cualidad del vidrio de tener menor conducción de temperatura que el metal, y por supuesto que nuestro albañil, coloque la carpintería en la fachada siguiendo las instrucciones tanto del fabricante como del director de la obra, porque no conseguimos nada si ponemos una buena carpintería aislante, pero luego no colocamos esta en la fachada con el aislamiento adecuado, porque la Rotura del Puente Térmico que conseguimos en el hueco, no la hemos logrado en su perímetro.
Por esto es recomendable buscar la ayuda y el consenso con un profesional, alguien que sepa de qué estamos hablando y pueda dar garantías posteriores de buen funcionamiento y tener un seguro de responsabilidad civil que pueda correr con los gastos en caso de un siniestro por su actuación.
Vía: Blog Plan Reforma
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