lunes, 25 de marzo de 2019

Incienso

Los expertos aseguran que los olores dejan un recuerdo imborrable en quien los vive, y que precisamente se rememora mejor, siempre, aquello que posee un perfume característico. ¿Quiere que su casa sea memorable? El incienso puede convertir su espacio vital en un universo carismático y relajante.
El incienso es un compuesto de resinas aromáticas de origen vegetal a las que se añaden aceites esenciales para que, al arder, emitan un humo con fragancia muy reconocible. Le ayudamos a descubrir cómo integrar los aromas de los inciensos en su estilo de decoración.

Una fragancia presente

Existen dos formas principales de presentar el incienso: combustible (o de quema directa) y no combustible.

El primero suele situarse en un receptáculo desde el que va soltando su fragancia. Se comercializa, en este caso, en espiral, en conos o en varas que pueden ser huecas o macizas.

También existen en la actualidad otras formas más modernas que desprenden emanaciones de incienso y envuelven con ese ambiente genuino tan característico, que algunos aseguran que resultan beneficioso para la salud. El incienso es, desde luego, un producto vinculado a la relajación, el bienestar personal y la intimidad, pues ha sido tradicionalmente utilizado en muy diversas religiones (desde el catolicismo hasta el budismo) para favorecer un estado positivo de espiritualidad.

¡Qué bien huele mi casa!

Las últimas tendencias de interiorismo y decoración no se conforman con crear espacios visuales atractivos, sino que dan un paso más hacia el objetivo de generar experiencias únicas y vivencias memorables. Así, las paredes de agua y las fuentes se están incorporando de manera llamativa incluso a los interiores, porque aportan sensaciones acústicas y térmicas muy positivas. En este sentido, la inclusión del incienso en nuestro entorno favorece esa sensibilidad exclusiva y aporta carisma y bienestar a los espacios.

Para sacarle el máximo rendimiento a esta decoración aromática con incienso, le proponemos lo siguiente:

Consiga un portaincienso y colóquelo en la estantería del salón, para que su energía les revitalice
ponga un incensario de sobremesa en la cómoda de su habitación, y enciéndalo en los momentos más íntimos

Integre estos aromas en una decoración de origen natural, con predominio de la madera, el bambú y otros materiales orgánicos

Ahora que ya conoce los secretos del incienso tan sólo le queda elegir el aroma que más le caracteriza y que le dé personalidad a su casa. 

Vía: Westwing

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