La intervención realizada por los arquitectos Pablo Rebelo, Pedro Pita y Deborah Spiaggia ha establecido una clara separación entre la zona de día y la de noche: la primera, formada por un conjunto de espacios de estar contiguos y, la segunda, por cuatro dormitorios dispuestos de forma lineal que disponen de baño propio.
A nivel estructural, la eliminación de algunos tabiques y puertas en los espacios de día ha dado lugar a ambientes más amplios, donde se respira una sensación de continuidad y fluidez.
En el centro de piso y separando ambos programas, una liviana cortina blanca con forma curva personaliza el espacio, definiéndolo “con un gesto escénico y lúdico”. Al final de este eje, un espejo juega con la percepción espacial, duplicando visualmente el espacio real.
La luz juega un papel esencial en los interiores, bañando y potenciando la paleta cromática de colores claros y elementos en madera, y realzando la sensación de calma de un diseño interior cuidadosamente equilibrado.
Para más información visiten: Pablo Pita Arquitectos
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