Descubra el Cosagach: el hygge escocés

Con el hygge y el lagom parecía que todo estaba inventado. Pero no, no es así. Ahora llega el cosagach, o lo que es lo mismo, el hygge escocés. Eso sí, con matices; y es que este nuevo término ha sido impulsado por el organismo oficial de turismo escocés, con el único fin de que las personas que ofrecen alojamiento en Escocia, adapten su entorno a un espacio mucho más acogedor. Un fórmula que para este organismo será todo un éxito durante el próximo 2018.

Cosagach, el impulso definitivo para el turismo

No es que Escocia esté mal en temas de turismo. Las cosas como son, es un lugar que siempre apetece ver. Pero sí es cierto que hay épocas que son extremadamente frías para los delicados cuerpos mediterráneos, por ejemplo. Así, observando y basándose en otros estilos de vida, el organismo oficial de turismo escocés ha querido subirse a ese tren. El informe anual de Visit Scotland ha catalogado esta fórmula del cosagach como una clara tendencia para este año. Un acierto absoluto que ayudará a crear espacios y ambientes agradables para que los turistas puedan relajarse tras sus largas visitas por Escocia.

La chimenea como pieza clave

No hay duda. La chimenea es la clave absoluta del cosagach. Pocas experiencias son tan cálidas y placenteras como tumbarse frente a una chimenea y disfrutar de una bebida caliente, quizá de un buen whisky escocés. Tras un paseo por el frío bosque, nada apetece más. Y por este motivo debe estar siempre presente.

Ojo, las chimeneas de obra son las que más encanto dan al ambiente. No obstante, no son ni de lejos las únicas opciones con las que nos encontramos. Están las chimeneas de leña, pero también las tienes eléctricas, de gas, las de bioetanol o las chimeneas de pellets.

Un sofá para estirar los pies

El sofá también es importantísimo en esta ecuación. Digamos que tumbarse en el suelo, por muy romántico que parezca en un momento dado, mejor no. Un sofá tiene que ser mullido y amplio. De esos que le abrazan al instante. Cuanto más grande mejor. Puede funcionar muy bien un sofá de esos que se extienden, para poder tumbarnos como si se tratara de una cama. También los sofás que cuentan con chaise longe.

Nunca hay suficientes mantas

Las mantas jamás deben faltar en un ambiente cosagach. No, el fuego no es suficiente, es necesario taparse. Estas mantas deben ser cálidas, con tejidos como la lana. Hay una tendencia a las mantas de punto XXL que puede encajar bastante bien en este concepto. Son mantas muy mullidas, con las que taparse en el sofá será una auténtica maravilla.

Una buena alfombra

Sí, he dicho que mejor tumbarse en el sofá, pero eso no implica que una alfombra sea un accesorio interesante para un ambiente cosagach. Las alfombras dan muchísima calidez a las estancias. Levantarse del sofá y pisar sobre ellas, es una agradable sensación. Opciones tiene muchas. Las hay más cálidas y más frías. Generalmente las de fibras naturales son un poco menos mullidas. Mejor optar por las alfombras de pelo largo, esas que al verlas ya le calientan automáticamente.

La luz, mejor cálida

Si tenemos en cuenta que las casas rurales, y alojamientos en general, se usan más por la tarde y por la noche, el tema de la luz es importante. Tenemos que tener luz suficiente para no ir chocándonos con las cosas. No obstante, el cosagach se siente más cómodo con una luz cálida. Zonificar funciona. Es decir, poner muchos puntos de luz para que cada área sea independiente. Además, también es buena idea apoyarse en pequeños puntos de luz como lámparas de pie o de mesa. Siempre con bombillas de luz cálida.

Materiales que hacen hogar

En cuanto a los materiales, quizá no descubra nada nuevo, pero hay que nombrarlo. La madera es el material cálido por excelencia. Así, no es de extrañar que en los ambientes cosagach no se prescinda de ella. Cualquier mueble, incluso el pavimento, trabajará por la calidez general con la ayuda de la madera.

Vía: habitissimo