Jetlag es un pequeño bar, ubicado en el centro de la ciudad de Praga, especializado en té y vino, aunque también sirve un delicioso café procedente de Chile. Curiosamente, su nombre procede del conocido concepto “jet lag”, en el que también se basó el estudio checho Mimosa architekti a la hora de diseñar su interior. El concepto del espacio trata sobre viajar a través de los diferentes husos horarios y como uno puede volar por todo el mundo a lo largo del establecimiento de 15 m de largo y 55 m2.
La solución espacial ha consistido en dividir el espacio en zonas horarias. Explica el estudio que “la curvatura de las zonas horarias reales se traduce en la morfología del bar. Cada zona empieza y termina con una curva que delimita parte del espacio de interés. La configuración de las barras define los diferentes espacios del local: el bar en sí, las estanterías del vino y del té, las lámparas y los bancos. El espacio es intencionalmente confuso, como si estuviera borroso”, pero al mismo tiempo perfectamente ordenado y delimitado.
Como material básico se eligió el acero inoxidable y las brillantes, sutiles y sugerentes curvas de inoxidable reflejan las líneas imaginarias que delimitan las zonas horarias. El metal brillante se asocia tanto a los fuselajes con chapas metálicas rematadas como a los recipientes de inoxidable de las bodegas de hoy en día.
Para más información visiten: Mimosa Architekti
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