Plantas que purifican

Dan más oxígeno del que consumen y eliminan las sustancias nocivas del aire. Son las 10 plantas campeonas de la limpieza.

Plantas, fuente de salud

¿Cuáles son? Todas las plantas purifican el aire aunque algunas, como el espatifilo, el ficus o la areca, son más eficaces. También regulan la humedad y atenúan el ruido.
 
¿Cómo actúan? Hacen de filtro contra los compuestos orgánicos volátiles (COV) que pasamos a nuestro organismo al respirar. Todas las partes de la planta (hojas, raíces...) participan en la transformación de las toxinas.
 
¿Dónde las coloco? Cerca de la luz. Deben estar libres de insecticidas, con las hojas limpias y tener un sustrato aireado y ligeramente húmedo. Según la NASA, con 1 o 2 plantas por cada 10m² es suficiente.

 

Areca

 

Junto a la ventana, es más efectiva. Coloque las plantas lo más cerca que pueda de la luz porque la necesitan para convertir las toxinas del aire en compuestos no tóxicos.

 

Su tamaño. Elija una areca grande porque la capacidad de limpiar el aire de esta palmera es proporcional a su tamaño. Combínela con plantas medias, como hiedra, filodendros o helechos, o bien elija un ejemplar grande si cuenta con bastante espacio.

 

¿Qué limpian? Las arecas, de 12 a 18 mcg de xileno la hora y entre 10 y 20 de tolueno. La hiedra, el benceno y el filodendro limpian el formaldehído.

 

Drácena

 

Para después de pintar. Su característico tronco y hojas alargadas son muy indicados en habitaciones recién amuebladas o pintadas porque filtran el formaldehído y el xileno, entre otros.

 

Colóquela en la habitación del bebé. Limpia el aire de tóxicos y favorece su descanso.

 

Sus cuidados. Agradecida y poco exigente, hay muchas variedades de drácena. Soportan bien los riegos irregulares ya que sus tejidos retienen el agua.

 

En composición. Puede combinar varias o compensar su verticalidad con una planta con caída, como el potos.

 

Ficus

 

Menos ruido y alergias en casa. Resistentes y fáciles de cuidar, por su porte quedan bien solos o acompañados por plantas colgantes o delicadas flores. Crecen con luz y semisombra. Limpian las sustancias nocivas de productos de limpieza o adhesivos, que causan alergias y dolores de cabeza, y atenúan de manera natural los ruidos.

 

Cuidados. Necesitan un sustrato ligero y aireado para potenciar su capacidad de purificación, ya que las raíces realizan parte importante del proceso.

 

Espatifilo

 

Elimina la mayoría de sustancias. Muy decorativa y fácil de mantener, sus elegantes flores blancas florecen todo el año. Por su porte y su capacidad purificadora, es adecuada para cualquier estancia de la casa. Limpia muchas de las sustancias contaminantes del aire como el formaldehido, presente en pinturas y colas, del que puede eliminar entre 5 y 15 mcg en función de su tamaño y vitalidad. También es efectivo contra el benceno, la acetona o el tricloroetileno.

 

Cuidados. Necesita luz para florecer, aunque vive bien con poca claridad. Le gusta la humedad en el aire, con lo que puede pulverizarla con agua no calcárea o ponerla sobre gravilla húmeda, pero no el riego excesivo. Combínela con plantas que realcen sus flores en un conjunto de verdes y blancos floridos, junto con begonias, kalanchoes o rosas mini.

 

¿Sabía qué? El pétalo blanco que cubre la espiga floral es una adaptación de la planta para proteger las flores.

 

Palmera de salón

 

Le ayuda a respirar mejor. La palmera de salón o chamaedorea elegans limpia prácticamente todos los tóxicos del aire, especialmente, el formaldehído, el xileno, el amoníaco o el benceno, responsables de afecciones respiratorias en bronquios, pulmones y mucosas. Vive bien tanto en el baño, porque le gusta la humedad, como en el dormitorio, donde le ayuda a respirar y dormir mejor. Busque un lugar con luz tamizada.

 

En composición aporta verticalidad. Queda bien en composiciones de plantas pequeñas con kalanchoe, espatifilo y hiedra.

 

Filodendro

 

Para los edificios enfermos. Los filodendros eliminan el formaldehído, un tóxico muy abundante en interiores cuya exposición prolongada a baja concentración puede causar el síndrome de los "edificios enfermos", con dolores de cabeza, cansancio, alteraciones cutáneas...

 

Cuidados. Son plantas vigorosas y agradecidas que necesitan riego regular y viven bien tanto con luz como en semisombra. Úselos para dar fuerza a una composición, a base de helechos y potos, o para crear un muro verde de aspecto selvático en la pared. Amigas de los árboles es la traducción de su nombre del griego. Se debe a que en las selvas tropicales trepa por los árboles y pueden alcanzar grandes dimensiones.

 

Cintas

 

Eliminan el 96% del CO. Tubérculos, hojas y raíces, todas sus partes se alían para eliminar el 96% del monóxido de carbono en 24 horas. También reduce los niveles de benceno, tolueno y formaldehído.

 

Sus cuidados. Resisten todo tipo de condiciones, desde mucha luminosidad hasta poca luz. Agradece los riegos abundantes en veranos calurosos. Es muy útil en cocinas, donde se utiliza gas, y en estancias en las que se reúne mucha gente, como salones o comedores. Combínela con plantas con un porte en abanico parecido, como juncos o juncias, o para crear contraste junto con rosales y hiedra de hoja pequeña.

 

Potos

 

Depura casi todos los tóxicos. Como hexano, benceno y sobre todo el monóxido de carbono, causante de náuseas, vértigos o cefaleas. También es efectivo con sustancias nocivas como tricloretileno o el tolueno. Vive bien en salones y despachos e, incluso, en cocinas y dormitorios. Puede crecer como trepadora, si se coloca un tutor, o como colgante, aunque entonces sus hojas son más pequeñas. Úselo para dar notas de verde en cualquier estancia o para crear conjuntos densos junto con kentias, arecas o filodendros. Colóquelo encima de un mueble para disimular las esquinas y hacer la estancia más agradable. Combine varios en una misma repisa y ganará verticalidad y movimiento.

 

Hiedra

 

La hiedra de hoja pequeña elimina del aire en 24 horas entre el 80 y el 90% del benceno, presente en plásticos, resinas o fibras sintéticas. Se trata de una planta muy resistente que agradece la humedad y crece como trepadora o en cascada tanto al sol como en semisombra.

 

Cactus

 

Según numerosos estudios, es muy eficaz contra las radiaciones y las ondas electromagnéticas. Colóquelo cerca de ordenadores, cableado y aparatos junto con otros cactus y plantas crasas. Necesitan abundante luz natural y poca agua.

 

Vía: El Mueble