Desde Woodendot, María J. Vargas & Daniel García han estado dándole vueltas a la manera ideal de dar un toque de luz y color a cualquier ambiente. Su familia de lámparas Ka, ya explotó esta idea desde la honestidad y la armonía.
Con Etna insisten en el empleo de líneas sencillas y limpias y empleo de materiales naturales, predominantemente la madera que viene de los bosques de Tierra de Pinares, en la provincia de Valladolid, donde la experiencia de la mano de obra artesana es un grado que se convierte en clave para impulsar esta joven empresa.
Etna es una colección de candelabros gigantes elaborada en madera maciza de pino; con unas curvas dibujadas en su parte superior que evocan lenguas de lava deslizándose por la ladera de un volcán, por ejemplo el siciliano que le da nombre. Esta zona de color da personalidad a las piezas y permite distinguir las vetas de la madera gracias a su translucidez.
La colección ofrece la posibilidad de crear una gran variedad de composiciones, ya que dispone de tres tamaños diferentes (1.150 mm, 950 mm y 800 mm) y una paleta de seis colores.
Y no acaba ahí, ya que la familia se amplía con Etna Mini, un juego de candelabros de forma tronco cónica elaborados en madera maciza de pino que imitan a sus hermanos mayores pero en tamaño reducido, para colocar a modo de centro de mesa, en una estantería o donde se desee.
También en tres tamaños y seis colores para poder combinarse.
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Para más información visiten: Woodendot
Vía: diario DESIGN
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