Disponer de una cabaña de veraneo en una remota isla paradisíaca no suele ser lo más habitual del mundo, pero si es su caso, le presentamos una curiosa y exótica forma de separar ambientes que seguro que le gusta y que encaja a la perfección en su cabaña.
Bueno, en realidad es una recurso que se podría adaptar casi a cualquier tipo de estancia —tampoco hace falta disponer de esa codiciada cabaña que todos querríamos— ya que se trata simplemente de una hilera de finos troncos que van del suelo al techo, y con una pequeña separación entre ellos.
Se nos ocurren un montón de ideas para hacer uso de esta idea en estancias con diferentes tipos de decoración, simplemente pintando los troncos en algún color concreto, como por ejemplo completamente blancos para un salón de estilo nórdico, o de colores variados para un cuarto infantil, etc.
Vía: Decoesfera
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