Los estores noche y día tienen una demanda cada vez mayor debido a sus inigualables prestaciones. Estos estores, denominados también “de luz mágica”, consiguen crear ambientes luminosos u oscuros, según los gustos del usuario. Pero, ¿cómo funcionan? ¿para qué estancias están recomendados? ¿qué mantenimiento tienen? Respondemos todos los interrogantes.
¿Qué son los estores noche y día?
Los estores noche y día son cortinas de accionamiento vertical constituidas por dos capas de tejido colocadas de forma paralela y diseñadas con bandas horizontales de diferente opacidad.
Su particularidad reside en su alternancia de bandas opacas y transparentes. Si se alinean las opacas del tejido delantero con las del trasero, se dejará pasar la luz exterior; mientras que, si se alternan las bandas luminosas con las opacas, el efecto será de una oscuridad prácticamente total.
En el siguiente vídeo puede verse claramente su funcionamiento:
¿Qué ventajas tienen?
Entre las ventajas de este tipo de estores caben destacar las siguientes:
Mejor difusión de la luz
El sistema de bandas opacas y traslucidas permite graduar la entrada de luz según la luminosidad que se quiera conseguir en un determinado momento, consiguiendo una amplia apertura (cuando se hacen coincidir las bandas traslucidas) o una disminución de la luz sin llegar a estar completamente a oscuras.
Mayor intimidad
Este tipo de estores permiten la entrada de luz sin restar intimidad a la habitación en las que están instaladas, ya que las lamas opacas ayudan a mantenerla.
Frescor
La posibilidad de graduar la entrada o salida de luz permite reducir la entrada de rayos de sol, y por tanto de calor, sin restar luminosidad.
Fácil de usar
Estas cortinas verticales adoptan el mecanismo de los estores enrollables y los de lamas. De los primeros toman su práctica y sencilla forma de recogerse y desplegarse; y de los segundos, la opción de controlar la luz creando el ambiente que se desee en cada momento.
¿Cuándo se recomiendan?
Los estores noche y día son una gran solución a la hora de crear ambientes en los que interese crear una alternancia de luz u oscuridad. Además, su efecto cálido y envolvente los convierte en una opción muy interesante para complementar la decoración de espacios contemporáneos.
Por ejemplo, pueden resultar de gran utilidad en salones, ya que con ellos se puede tamizar la luz evitando los molestos reflejos en la pantalla de la televisión, o dar mayor luminosidad cuando se use la mesa del comedor.
No obstante, dado que no consiguen una oscuridad total, no se recomienda su utilización en dormitorios. Para estos casos, a falta de una persiana, están más indicados los estores opacos.
Cuidados y mantenimiento
Al tratarse de cortinas técnicas, los estores noche y día incorporan un sistema que repele la suciedad y el polvo. Por lo que, en general, no requieren un gran mantenimiento. Tan solo es necesario limpiar el polvo con regularidad utilizando un plumero o un trapo seco.
Si aparece alguna mancha, se puede usar una bayeta limpia y ligeramente humedecida para tratar de forma puntual la zona afectada.
Las condiciones ambientales en las que se encuentre el estor pueden hacer que sea necesario efectuar una limpieza más profunda una vez al año. Por ejemplo, si en la vivienda hay fumadores.
En estos casos puede interesar someterlo a una limpieza técnica profesional por ultrasonidos, que consiste en un método que conjuga agua caliente con un detergente especialmente formulado que, junto con un movimiento de ondas de sonido, consigue desincrustar la suciedad más persistente, además de higienizar y eliminar malos olores y otros contaminantes.
¿Qué son los estores noche y día?
Los estores noche y día son cortinas de accionamiento vertical constituidas por dos capas de tejido colocadas de forma paralela y diseñadas con bandas horizontales de diferente opacidad.
Su particularidad reside en su alternancia de bandas opacas y transparentes. Si se alinean las opacas del tejido delantero con las del trasero, se dejará pasar la luz exterior; mientras que, si se alternan las bandas luminosas con las opacas, el efecto será de una oscuridad prácticamente total.
En el siguiente vídeo puede verse claramente su funcionamiento:
¿Qué ventajas tienen?
Entre las ventajas de este tipo de estores caben destacar las siguientes:
Mejor difusión de la luz
El sistema de bandas opacas y traslucidas permite graduar la entrada de luz según la luminosidad que se quiera conseguir en un determinado momento, consiguiendo una amplia apertura (cuando se hacen coincidir las bandas traslucidas) o una disminución de la luz sin llegar a estar completamente a oscuras.
Mayor intimidad
Este tipo de estores permiten la entrada de luz sin restar intimidad a la habitación en las que están instaladas, ya que las lamas opacas ayudan a mantenerla.
Frescor
La posibilidad de graduar la entrada o salida de luz permite reducir la entrada de rayos de sol, y por tanto de calor, sin restar luminosidad.
Fácil de usar
Estas cortinas verticales adoptan el mecanismo de los estores enrollables y los de lamas. De los primeros toman su práctica y sencilla forma de recogerse y desplegarse; y de los segundos, la opción de controlar la luz creando el ambiente que se desee en cada momento.
¿Cuándo se recomiendan?
Los estores noche y día son una gran solución a la hora de crear ambientes en los que interese crear una alternancia de luz u oscuridad. Además, su efecto cálido y envolvente los convierte en una opción muy interesante para complementar la decoración de espacios contemporáneos.
Por ejemplo, pueden resultar de gran utilidad en salones, ya que con ellos se puede tamizar la luz evitando los molestos reflejos en la pantalla de la televisión, o dar mayor luminosidad cuando se use la mesa del comedor.
No obstante, dado que no consiguen una oscuridad total, no se recomienda su utilización en dormitorios. Para estos casos, a falta de una persiana, están más indicados los estores opacos.
Cuidados y mantenimiento
Al tratarse de cortinas técnicas, los estores noche y día incorporan un sistema que repele la suciedad y el polvo. Por lo que, en general, no requieren un gran mantenimiento. Tan solo es necesario limpiar el polvo con regularidad utilizando un plumero o un trapo seco.
Si aparece alguna mancha, se puede usar una bayeta limpia y ligeramente humedecida para tratar de forma puntual la zona afectada.
Las condiciones ambientales en las que se encuentre el estor pueden hacer que sea necesario efectuar una limpieza más profunda una vez al año. Por ejemplo, si en la vivienda hay fumadores.
En estos casos puede interesar someterlo a una limpieza técnica profesional por ultrasonidos, que consiste en un método que conjuga agua caliente con un detergente especialmente formulado que, junto con un movimiento de ondas de sonido, consigue desincrustar la suciedad más persistente, además de higienizar y eliminar malos olores y otros contaminantes.
Vía: Hogar Mapfre
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