Armarios japoneses

El orden y la armonía son dos de los conceptos fundamentales de la decoración japonesa. Los armarios japoneses suelen ser sobrios y organizados. Ocupan el espacio justo y su misión normalmente es más práctica que decorativa.

Armarios japoneses para crear armonía

En las casas japonesas tradicionales el espacio no era lo más abundante. Por eso, todos los muebles se hacían pensando en aprovechar cada hueco y en crear un ambiente ordenado y armonioso. No suele haber más elementos de los necesarios y prevalecen las líneas sencillas. De la decoración japonesa deriva la que conocemos como zen que busca, ante todo, el equilibrio a través de líneas rectas y colores neutros consiguiendo un resultado muy elegante.

Los armarios japoneses tienen un par de características fundamentales que a todos nos vienen a la mente si pensamos en ellos. Se trata, por un lado, de las puertas correderas: ayudan a ahorrar espacio y permiten colocar otros elementos cerca. Y el shoji: este papel especial, resistente y traslúcido que se utiliza en puertas y para separar espacios. Los armarios japoneses suelen cumplir con estas dos premisas y así lo deberíamos tener en cuenta a la hora de elegir uno.

Cómo lograr una ambientación zen con armarios japoneses

A la hora de colocar armarios japoneses observaremos primero el espacio y el resto de elementos de la habitación. El material fundamental para este tipo de armario es la madera o el bambú, conservando su color original o pintada en negro. En cuanto a la puerta, puede ser o no traslúcida a distintos niveles. Aunque, originalmente, el shoji deja ver lo que hay detrás, suele quedar mejor una puerta que no desvele el contenido del armario.

De esta forma, el resultado global de la habitación quedará más limpio. Una buena opción a la hora de poner armarios japoneses es encargarlos a medida. De esta forma, puede aprovechar el ancho completo de la pared y tener más almacenaje. En caso de que se enamore de armarios japoneses ya fabricados, intente colocarlos de manera centrada. Busque, ante todo, un diseño sencillo y apacible.
Aproveche las puertas traslúcidas para colocar iluminación suave y cálida dentro de los armarios japoneses. Creará un efecto muy bonito y acogedor.

Si puede contar con un diseño a medida aproveche para organizar el interior de la forma más útil posible. No olvide que la decoración japonesa es equilibrio por fuera pero ¡también por dentro!

Vía: Westwing