Lo vintage no pasa de moda. Y además, es un estilo muy ecléctico que puede convertir su casa en un lugar bohemio, original o elegante según elija los complementos. Pero siempre acogedor, por eso no podrá resistirse a colocar una alacena vintage en su cocina para darle encanto al lugar más transitado de la casa.
Alacena vintage: el encanto de lo retro en su cocina
La decoración vintage combina elementos rescatados de diferentes épocas que suelen tener algo en común: mucho encanto y personalidad. Los muebles desgastados por el paso del tiempo y los colores pastel hacen que la habitación donde los coloquemos cobre vida propia. Una gran alacena puede ser la protagonista del lugar y acaparar todas las miradas, además de la vajilla, claro. Y hay algunos puntos clave que no podemos olvidar a la hora de elegir una alacena vintage:
Hágala destacar con el color: Elija una gran alacena vintage roja para una habitación en tonos blancos y madera. Además de ser la protagonista, le dará calidez al espacio.
Dele su propio espacio: Reserve una pared completa para su alacena vintage y así destacará sobre el resto. Si la alacena es blanca puede pintar la pared en algún tono pastel o decorarla con papel pintado para que resalte.
¡Hágalo usted mismo! Márquese un DIY pintando una antigua alacena y lijándola para darle una apariencia desgastada. También puede forrar o pintar el fondo para que destaquen los compartimentos del mueble y que quede de lo más original.
Siéntase a la mesa en comedor retro y con carácter
Si algo tiene una alacena vintage es que puede dar mucha personalidad a la habitación, y hay cientos de modelos entre los que elegir la adecuada. Es importante, sobre todo, tener en cuenta el tamaño, ya que para que el mueble destaque habrá que darle su espacio. No la rodee en exceso de otros muebles o su alacena vintage perderá su efecto decorativo. Aunque pueda parecer contraproducente, no la combine con nada más de la habitación.
Por ejemplo: puede elegir una alacena vintage de tamaño mediano y color amarillo vivo aunque la mesa y el resto de muebles estén en tonos madera o pastel. O escoger materiales diferentes como la malla metálica para las puertas o una estructura de hierro. Eso convertirá una simple alacena vintage en una pieza clave de la decoración y en una solución de almacenaje vanguardista y original.
Hágala destacar con el color: Elija una gran alacena vintage roja para una habitación en tonos blancos y madera. Además de ser la protagonista, le dará calidez al espacio.
Dele su propio espacio: Reserve una pared completa para su alacena vintage y así destacará sobre el resto. Si la alacena es blanca puede pintar la pared en algún tono pastel o decorarla con papel pintado para que resalte.
¡Hágalo usted mismo! Márquese un DIY pintando una antigua alacena y lijándola para darle una apariencia desgastada. También puede forrar o pintar el fondo para que destaquen los compartimentos del mueble y que quede de lo más original.
Siéntase a la mesa en comedor retro y con carácter
Si algo tiene una alacena vintage es que puede dar mucha personalidad a la habitación, y hay cientos de modelos entre los que elegir la adecuada. Es importante, sobre todo, tener en cuenta el tamaño, ya que para que el mueble destaque habrá que darle su espacio. No la rodee en exceso de otros muebles o su alacena vintage perderá su efecto decorativo. Aunque pueda parecer contraproducente, no la combine con nada más de la habitación.
Por ejemplo: puede elegir una alacena vintage de tamaño mediano y color amarillo vivo aunque la mesa y el resto de muebles estén en tonos madera o pastel. O escoger materiales diferentes como la malla metálica para las puertas o una estructura de hierro. Eso convertirá una simple alacena vintage en una pieza clave de la decoración y en una solución de almacenaje vanguardista y original.
Vía: Westwing
No hay comentarios:
Publicar un comentario