Line Architects es un estudio de arquitectura moldavo, fundado y dirigido por el arquitecto e incondicional del diseño minimalista Dmitrii Petrov. Ejemplo de ello es este apartamento de 68 m2 que, con sus interiores sobrios, serenos y de tonos oscuros, se presenta como un cómodo espacio frente al ajetreo y el estrés de la vida cotidiana.
Atemporal en su planteamiento formal y conceptual, la vivienda se ha distribuido en cuatro zonas bien diferenciadas, que se plantean como una secuencia: la sala de estar, la cocina, un baño con ducha y vestidor, y el dormitorio con una bañera exenta. Todos estos interiores emanan un ambiente masculino que se percibe en cada rincón del piso. Explica el arquitecto que “su atmósfera se asemeja a la de un vehículo de lujo con asientos de cuero, un panel mate negro y puertas Lambo, un lugar donde se puede fumar puros y donde se dejan caer vestidos de seda”.
Para conseguir la atmósfera masculina y el diseño minimalista que define el apartamento (si el diseño interior tiene género), el estudio de arquitectura utiliza suelo de parquet de roble, colocado en forma de espiga, techo de hormigón, vidrio, cuero, tejidos y paredes pintadas en tonos oscuros y acabado satinado.
A pesar de tener sólo 68 m2, los espacios se perciben como amplios y cómodos. El salón cuenta con un gran sofá de cuero y la luz del exterior queda tamizada por persianas. El cuarto de baño tiene en su interior un pequeño vestidor y una pared de vidrio a través de la cual se puede ver una pared blanca de la sala de estar. La cocina, distribuida en forma de U, carece de puerta y se ve como un almacén con la zona de almacenaje abierta.
Para más información visiten: Line Architects
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