Imprescindibles en su caja de herramientas, las arandelas son esos pequeños y sencillos elementos de ferretería que se utilizan siempre acompañadas de tornillos, fundamentales en trabajos de mecánica, fontanería o en el montaje de muebles.
Aquí le contamos los tipos que hay y para qué se usan, así podrá elegir las que más le convienen.
¿Qué función tienen las arandelas?
Básicamente tienen la función de repartir la fuerza del apriete de un tornillo o tuerca para que la presión no recaiga en un único punto dañando el material. La arandela se coloca entre la cabeza del tornillo y el material o entre el material y la tuerca, si la lleva. Por tanto, las arandelas se usan para:
• Reforzar una unión realizada con un tornillo o tuerca.
• Proteger el material que se atornilla para que no se rompa con la presión.
• Atornillar en perforaciones que son más grandes que el tornillo.
• Prevenir que se aflojen uniones sometidas a vibración.
• Conseguir una superficie lisa para el atornillado en materiales rugosos o con superficie irregular.
• Reforzar una unión realizada con un tornillo o tuerca.
• Proteger el material que se atornilla para que no se rompa con la presión.
• Atornillar en perforaciones que son más grandes que el tornillo.
• Prevenir que se aflojen uniones sometidas a vibración.
• Conseguir una superficie lisa para el atornillado en materiales rugosos o con superficie irregular.
Estos son los tipos de arandelas
Arandelas autoblocantes
Se trata de un tipo de arandela con dientes, pensada para bloquear una unión con tornillo sobre materiales blandos, como la madera. Al apretar el tornillo, los dientes se clavan en el material impidiendo que se afloje la unión.
Hay otra versión de estas arandelas que trabajan por pares, es decir, en cada unión se colocan dos arandelas dentadas, encajándose los dientes de una en los de la otra y sirven para evitar que la unión se afloje aunque esté sometida a vibraciones fuertes.
Arandelas tipo grower
Se trata de arandelas circulares que no están cerradas, quedando uno de sus extremos elevado. Cuando se realiza el apriete, la arandela queda totalmente plana. Su efecto de refuerzo se produce gracias a la elasticidad que permite su forma y se suelen colocar por el lado de la tuerca. Algunas tienen picudos los extremos abiertos, con lo que se refuerza el bloqueo, al clavarse los picos en la tuerca.
Están pensadas para que las uniones duren más tiempo sin aflojarse, aunque estén sometidas a movimientos. Esto es especialmente interesante en grandes estructuras, en obras civiles, pero también en muebles de mucho uso, como sillas y mesas.
Arandelas especiales cartón-yeso
También llamadas florones, son arandelas ligeramente cónicas. El objeto de esto es que, al ejercer el apriete los bordes de la arandela se claven ligeramente en el material, reforzando la unión.
Microarandelas
Son arandelas planas de tamaño reducido, de 2 o 3 mm de diámetro. Sus usos van desde trabajos de mecánica, modelismo y joyería a mantenimiento de bicicletas, etc.
Arandelas de nailon
También son arandelas planas, ideales para uniones de metal contra metal, madera contra madera o metal contra madera, incluso a la intemperie. Tienen numerosos usos: como separadores, para aislar dos metales entre sí, en trabajos de mecánica…
Arandelas de estanqueidad o EDPM
Son arandelas fabricadas totalmente en un tipo de caucho o mixtas (de acero y caucho vulcanizado). Se utilizan para evitar la entrada de agua en maquinaria o armarios eléctricos o cualquier otra fijación con tornillo y tuerca donde se requiera una protección total contra el agua. Es conveniente apretar los tornillos con atornillador eléctrico para garantizar la estanqueidad.
Hay arandelas de estanqueidad especialmente pensadas para usar en las juntas de radiadores de agua, en las válvulas, detentores, purgadores, tapas y reductores que resisten las altas temperaturas del agua.
Son las más comunes para las uniones con tornillo y tuerca. Las hay de distinto diámetro, de distinto grosor y fabricadas en diferentes materiales, como latón, acero cincado, acero pavonado o acero inoxidable, estas últimas perfectas para uniones en el exterior de la vivienda o lugares sometidos a humedad.
Estas arandelas se utilizan para uniones de metal contra metal, madera contra madera o metal contra madera y en uniones de tornillo y tuerca, cuando la cabeza del tornillo es solo ligeramente más grande que el orificio.
Arandelas autoblocantes
Se trata de un tipo de arandela con dientes, pensada para bloquear una unión con tornillo sobre materiales blandos, como la madera. Al apretar el tornillo, los dientes se clavan en el material impidiendo que se afloje la unión.
Hay otra versión de estas arandelas que trabajan por pares, es decir, en cada unión se colocan dos arandelas dentadas, encajándose los dientes de una en los de la otra y sirven para evitar que la unión se afloje aunque esté sometida a vibraciones fuertes.
Arandelas tipo grower
Se trata de arandelas circulares que no están cerradas, quedando uno de sus extremos elevado. Cuando se realiza el apriete, la arandela queda totalmente plana. Su efecto de refuerzo se produce gracias a la elasticidad que permite su forma y se suelen colocar por el lado de la tuerca. Algunas tienen picudos los extremos abiertos, con lo que se refuerza el bloqueo, al clavarse los picos en la tuerca.
Están pensadas para que las uniones duren más tiempo sin aflojarse, aunque estén sometidas a movimientos. Esto es especialmente interesante en grandes estructuras, en obras civiles, pero también en muebles de mucho uso, como sillas y mesas.
Arandelas especiales cartón-yeso
También llamadas florones, son arandelas ligeramente cónicas. El objeto de esto es que, al ejercer el apriete los bordes de la arandela se claven ligeramente en el material, reforzando la unión.
Microarandelas
Son arandelas planas de tamaño reducido, de 2 o 3 mm de diámetro. Sus usos van desde trabajos de mecánica, modelismo y joyería a mantenimiento de bicicletas, etc.
Arandelas de nailon
También son arandelas planas, ideales para uniones de metal contra metal, madera contra madera o metal contra madera, incluso a la intemperie. Tienen numerosos usos: como separadores, para aislar dos metales entre sí, en trabajos de mecánica…
Arandelas de estanqueidad o EDPM
Son arandelas fabricadas totalmente en un tipo de caucho o mixtas (de acero y caucho vulcanizado). Se utilizan para evitar la entrada de agua en maquinaria o armarios eléctricos o cualquier otra fijación con tornillo y tuerca donde se requiera una protección total contra el agua. Es conveniente apretar los tornillos con atornillador eléctrico para garantizar la estanqueidad.
Hay arandelas de estanqueidad especialmente pensadas para usar en las juntas de radiadores de agua, en las válvulas, detentores, purgadores, tapas y reductores que resisten las altas temperaturas del agua.
Vía: Leroy Merñin
No hay comentarios:
Publicar un comentario