La conocida silla Serie 7 fue diseñada por el arquitecto y diseñador danés Arne Jacobsen en 1955 como una evolución de su modelo anterior, la silla Hormiga de 1951, con el que guarda cierto parecido.
Esta silla se convirtió inmediatamente en una de las gamas de sillas de mayor éxito comercial y de hecho aún hoy en nuestros días se encuentra en todo tipo de viviendas, oficinas, salas de juntas o cocinas.
La silla Serie 7 consta únicamente de dos piezas y su fabricación resulta sumamente económica, motivo por el cual seguramente se convirtió en un icono de masas. De hecho, se le considera la silla más vendida de la historia del mueble, y desde luego el “best seller” de la firma danesa de mobiliario que lo produce, Fritz Hansen.
Desde su creación se han vendido más de 5 millones de unidades de este modelo y se siguen fabricando 300.000 al año. En todo el mundo se asocia al diseño escandinavo por su carácter práctico y funcional.
Consta de una chapa moldeada a presión en 9 maderas distintas o lacas de diversos tonos y cuatro patas de acero cromado, convirtiéndose en el máximo exponente de la técnica del laminado.
La forma de sus patas la convierten en una silla apilable, totalmente práctica para cocinas o espacios reducidos. Está disponible en lacados a medio poro o poro completo en una amplia gama de colores
Esta silla se encuentra además en diferentes versiones, según lleven reposabrazos, ruedas, etc. aunque su versión clásica, sencilla, ligera y con el asiento y respaldo de una pieza, es la que ha sobrevivido con más éxito al paso del tiempo.
2015 fue precisamente el año de su 60 cumpleaños, para cuya celebración la firma danesa presentó dos ediciones especiales de este modelo que sólo estuvieron disponibles durante un año. Se trata de dos versiones en tonos diferentes adaptados a cada género: la versión masculina (en azul marino) y la versión femenina (en rosa palo), ambas con patas lacadas en oro de 24 kilates.
Para más información visiten: Fritz Hansen
Vía: Decofilia
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