En esta ocasión les queremos mostrar un pequeño apartamento lleno de grandes ideas decorativas, con un espacio más bien limitado —tan solo 45 metros cuadrados—, pero en el que sin duda se ha llegado a un resultado de lo más vistoso y funcional.
Antes de nada comentar que este proyecto ha sido llevado a cabo por el estudio ruso INT2 Architecture, cuyos trabajos de interiorismo merecen que les echen un vistazo, porque no tienen desperdicio —tienen el enlace al final del artículo—.
Ahora si, comenzamos nuestra visita a este apartamento tan llamativo por la zona principal, que es una gran estancia en la que nos encontramos juntos, pero no revueltos, el salón, la cocina y el dormitorio, este último separado por unas grandes cortinas que van del techo al suelo.
Centrándonos en el dormitorio, lo que más llama la atención —aparte de la división que hemos mencionado anteriormente— es la especie de tarima alta sobre la que descansa la cama y que es, ni más ni menos, que un ingenioso sistema de cajones para disponer de más espacio de almacenaje bajo el suelo, algo realmente importante en viviendas de pocos metros cuadrados.
En cuanto a la decoración, nos encontramos con grandes ideas decorativas de diferentes estilos, como la mesilla de noche creada con tuberías negras y madera, las paredes de ladrillo visto pintado de blanco o la lámpara compuesta por dos bombillas que cuelgan de sendos cables negros. Una decoración con mezcla de estilos que casan bastante bien entre ellos, y con un coste económico muy bajo —o debería serlo—, dado que todo es reciclado o hecho a mano.
El salón, por su parte, tiene un estilo decorativo muy fresco y moderno, con colores llamativos y elementos de diseño que redondean el conjunto, como por ejemplo nuestra querida silla Eames.
La barra de la cocina crea una separación perfecta con el salón, aunque también se ha dispuesto un pequeño muro de ladrillo blanco a modo de división, y que sirve además para colgar la televisión por un lado y disponer de un gran armario despensa por el otro.
La cocina se ha convertido en nuestra estancia favorita. Nos encanta la distribución del mobiliario en tan poco espacio, así como la combinación de muebles blancos con encimera de madera, pero lo que más nos ha gustado han sido los detalles decorativos, como la pared de pizarra, los originales y coloridos azulejos, o la impresionante fotografía en blanco y negro del alce.
Aunque el baño tampoco se queda atrás, la verdad. En este caso se han combinado los azulejos blancos cuadrados con un suelo negro y toques en amarillo, dando como resultado un ambiente muy moderno y limpio. A destacar sin duda el detalle de usar los azulejos como si de un tablero de Scrabble se tratase —y con palabras alegóricas al baño—, así como el precioso revestimiento en madera de la bañera.
Para más información visiten: INT2 Architecture
Vía: Decoesfera
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