Consta de tres elementos principales: una columna de aluminio acanalada con aberturas de ventilación en cuyo interior se aloja la fuente luminosa, un cuenco parabólico rotatorio de vidrio transparente y un reflector curvado de aluminio entallado. Proporciona una suave luz tamizada que puede orientarse girando el "cuenco luminoso" 360 grados. Se trata de una solución sencilla pero ingeniosa que ilustra el deseo de los Castiglioni de alcanzar los mejores resultados con los menos medios posibles. Con esta combinación de una estética manifiestamente industrial Taccia anticipa el vocabulario clásico irónico del movimiento moderno.
Con la salida al mercado de la hermana pequeña, la lámpara Taccia Small , permite situarla en cualquier espacio.
Existe la versión con el difusor en PMMA que abarata el precio.
Para más información visiten: Flos
Vía: Luz.es
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