El Panel Sandwich

El panel sandwich nació hace más de 40 años como un elemento de construcción rápida para ambientes industriales. Sus grandes propiedades aislantes y su sencilla instalación hacen de él, un material a tener en cuenta a la hora de rehabilitar superficies como la fachada o el tejado. Si está pensando en reparar o restaurar alguna de estas áreas, aquí le explicamos qué es y las principales características del panel sandwich.

Actualmente, este tipo de material funciona en todo tipo de ambientes. En edificios residenciales sustituyendo a la tradicional teja, o en locales comerciales como revestimiento exterior.

Es un excelente material, cada vez más utilizado por arquitectos y profesiones relacionados con la rehabilitación de tejados y fachadas. Sus sobresalientes prestaciones técnicas permiten reducir los costes relacionados con la instalación, montaje y mano de obra.

¿Qué es el panel sándwich?

El panel sándwich o panel compuesto está formado por un núcleo de espuma de poliuretano o polisocianurato que, a su vez, está unida a dos capas exteriores metálicas, generalmente de acero o aluminio.

Durante el proceso de fabricación, se preparan las capas perfilando la forma deseada. Tras este paso, se inyecta la espuma de poliuretano o polisocianurato en fase líquida y mediante una reacción química se une a las dos capas de cobertura. Una vez dado este paso el panel se cortará o almacenará, según las necesidades.

Ventajas del panel sandwich

Montaje sencillo.
Buen aislamiento tanto térmico como acústico.
Gran impermeabilidad. Protección frente al agua.
Gran durabilidad y resistencia ante condiciones climáticas adversas.
Sencilla reparación y/o sustitución si los paneles resultan dañados.
Producto económico gracias a su fabricación en masa.
Resistencia al fuego en los paneles de lana de roca.

Por todos estos motivos, este tipo de material puede ser utilizado para la rehabilitación de un edificio o para crear nuevos proyectos desde cero.

Vía: Buenos Días Buenas Noches