“Peculiar e inspirador”, es como desde el equipo de 314BCN definen el antiguo cinema Club Coliseum de Barcelona. Un lugar entrañable y con una larga tradición a sus espaldas, que sigue vivo en el nuevo local a través de su gran espacio central. Además de la pantalla de cine visible desde casi cualquier rincón de la tienda, la esquina opuesta se ha ocupado con una grada donde relajarse y asistir a eventos. De esta forma, la propuesta mezcla el mundo viajero y de ensueño, con recuerdos de la historia del espacio original.
Un inspirador viaje
La distribución de la tienda ha sido diseñada a partir de patrones de marketing. Con el directorio de la tienda en el lateral derecho, en el izquierdo se proyectan vídeos de viajes inspiradores sobre una gran pantalla “videowall”.
La distribución de la tienda ha sido diseñada a partir de patrones de marketing. Con el directorio de la tienda en el lateral derecho, en el izquierdo se proyectan vídeos de viajes inspiradores sobre una gran pantalla “videowall”.
En el centro el espacio, un globo aerostático retroiluminado traslada al visitante a un mundo imaginario. Frente a él se sitúa el mostrador, envuelto en parte por la madera del pavimento. Tras él, un jardín vertical oculta el armario de telecomunicaciones.
Para facilitar la movilidad y versatilidad espacial, muchos muebles se han diseñado con ruedas. De esta forma, se pueden desplazar dependiendo de las necesidades de la tienda, pudiendo generar nuevos puestos de asesores en caso de así necesitarse.
El sótano gira en torno a un gran patio central con vegetación. En él, los visitantes pueden leer libros de viajes o simplemente hacer una pausa para disfrutar del entorno. Con información sobre la tienda, las pantallas verticales táctiles retroiluminadas introducen un nuevo concepto de totém en el espacio.
Zonas de espera con césped, lamparas de cuerda colgadas y columpios, conviven con un espacio chill-out con sofás y butacas. Un gran logo de Pangea en madera decora el techo del espacio central. Una gran roca, que a la vez es una cascada, oculta el bloque de escaleras de emergencia y aporta frescura.
Para facilitar la movilidad y versatilidad espacial, muchos muebles se han diseñado con ruedas. De esta forma, se pueden desplazar dependiendo de las necesidades de la tienda, pudiendo generar nuevos puestos de asesores en caso de así necesitarse.
Experiencia interactiva
El sótano gira en torno a un gran patio central con vegetación. En él, los visitantes pueden leer libros de viajes o simplemente hacer una pausa para disfrutar del entorno. Con información sobre la tienda, las pantallas verticales táctiles retroiluminadas introducen un nuevo concepto de totém en el espacio.
Junto a la grada de madera, un tobogán en espiral de acero mate permite a los visitantes volver a ser niños por un momento.
Zonas de espera con césped, lamparas de cuerda colgadas y columpios, conviven con un espacio chill-out con sofás y butacas. Un gran logo de Pangea en madera decora el techo del espacio central. Una gran roca, que a la vez es una cascada, oculta el bloque de escaleras de emergencia y aporta frescura.
Contenedores marítimos dan forma a los puestos donde los asesores reciben de forma personalizada a cada cliente. Más privados, algunos de ellos incluyen salas de reuniones.
Ocupadas por la Casa del Libro, las estanterías laterales sobre la pasarela generan un recorrido. El partner de Pangea no ha querido perder la ocasión de crear un espacio especializado en libros de viajes.
Vía: diarioDESIGN
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