El chef José Garces, ganador del premio James Beard, quiso que los clientes sintieran como si hubieran viajado a los relajantes y vibrantes pueblos playeros de la costa de México mientras comen en Buena Onda, una taquería y bar de margaritas. Inspirado por el ambiente de Acapulco y los bloques de color de Luis Barragán, CORE trabajó en estrecha colaboración con el Chef Garces para encontrar el equilibrio adecuado de color y textura para cada uno de los elementos únicos del restaurante.
Los espacios de Buena Onda se definen por volúmenes y sus diferentes materiales: el patrón de celosía en "X" de la Unidad de Muro de Concreto (CMU), listones de madera, azulejos apilados y una textura de yeso rastrillada. Los colores distintivos de azules fríos y blancos cálidos con un acento de amarillo cítrico crean diferenciación entre las superficies, además de sus variadas texturas.
El volumen de la cubierta de madera sobre la barra hace referencia a una "palapa", una choza de paja tradicional que se encuentra en las playas de México. Las sillas de Acapulco también fueron estudiadas, y surgen en la forma de las característica luces colgantes hechas a medida que conectan en cascada a través del espacio de comida.
La paleta lúdica y calmante, la reinterpretación de las sillas Acapulco como iluminación y la elevación de los humildes materiales encontrados en México fueron desarrollados como un kit de piezas clave para futuras aplicaciones a restaurantes.
Para más información visiten: CORE architecture + design
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