Un antiguo aparcamiento fue dividido en diferentes apartamentos en el corazón de París. Para transformar esta cruda superficie en apartamentos, los gestores del proyecto querían conservar la estructura para mantener su aspecto industrial.
El reto principal fue aprovechar la única fuente de luz: orientada al sur y situada en uno de los ángulos de los apartamentos. La idea era compactar la zona nocturna para beneficiarse de una mayor flexibilidad en el espacio de estar. Muebles periféricos de madera, que sirven como biblioteca, cocina, escritorio y almacenamiento, se hicieron para generar espacio y continuidad visual en toda la vivienda. La pared móvil puede ser ocasionalmente usada para alojar amigos.
Las vigas de hormigón y el techo se mantienen para mantener el espíritu del lugar, mientras se disminuye la resonancia gracias al techo falso de listones de madera a medida.
Para más información visiten: Atelier 56S
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