Aunque tengan una apariencia rocosa, la colección ROCK en realidad está formada por lámparas de plástico pintado. Su diseño pretende evocar a una piedra preciosa hallada en el interior de una roca volcánica, mostrándose como algo inesperado, como una sorpresa, como una versión facetada de la clásica pantalla semiesférica, siguiendo una geometría bastante irregular. La pantalla muestra una superficie rugosa por fuera, mientras que la superficie interior tiene un acabado liso y brillante (como el nácar).
Hay una versión clara, oscura, y otra dorada, pero todas ellas resaltan por la manera tan peculiar de reflejar la luz desde su interior, provocando un efecto único, y adquiriendo un gran protagonismo allí donde se instalen, ya sea en solitario o agrupadas, tanto en ambientes residenciales como corporativos.
Estas originales lámparas están fabricadas en plástico ABS+policarbonato moldeado, y tienen un acabado pintado.
La versión de pie de la lámpara Rock alcanza una altura de 182 centímetros, viene con una base con forma de hexágono, y una pantalla de 50cm de diámetro. La versión colgante tiene una longitud máxima del cable de 228cm, lo que permite poder colgarla de techos bastante altos, la pantalla se fabrica en el mismo tamaño y colores.
Las lámparas de plástico Rock son un producto de la marca italiana Foscarini, especializada en la fabricación de accesorios para la iluminación, fundada en 1981, y adquirida siete años después por Carlo Urbinati y Alessandro Vecchiato.
Para más información visiten: Foscarini
Vía: isArquitectura
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