
Sus características le confieren un diseño ergonómico que permite al usuario estar cómodo ya sea si prefiere sentarse en posición vertical o si desea adquirir una postura más relajada.

Su creatividad ha quedado plasmada en Rock. No es habitual encontrar un sillón que tenga una estética tan fragmentada, como si se tratase de una recopilación de distintas partes. Lo importante es que, a la hora de usar el mueble, la persona no notará estas divisiones como algo incómodo o molesto: por el contrario, estas características hacen a la ergonomía del sillón.
Cabe destacar que Wilkinson ha ideado el sillón Rock con una doble finalidad. El diseñador buscó que este mueble pudiera funcionar por unidad (es decir, instalando sólo un sillón en el ambiente) pero también en grupo (acumulando varios ejemplares en un mismo entorno).
Es posible, por lo tanto, adquirir un único sillón Rock y otorgarle un protagonismo exclusivo en la sala. En cambio, si la idea es que toda la familia pueda disfrutar de sus comodidades mientras conversan o miran televisión, se pueden juntar varios de estos sillones.
Para más información visiten: Samuel Wilkinson
Vía: Decoraciona.com
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