Colocar cristales para terrazas, proporciona una solución ideal para añadir un espacio nuevo y adicional a su hogar. Los cristales protegen contra la lluvia, el frío, el viento, el ruido y la suciedad. La terraza se puede amueblar y se puede convertir en un lugar para sus actividades preferidas y de tiempo libre.
Los cristales para terraza abren nuevas posibilidades para decorar y disfrutar su terraza. Acercan el salón hacia el exterior y la naturaleza. Cuando hace buen tiempo los cristales se pueden abrir para disfrutar del calor del verano. Y cuando hace más fresco el sol calienta bien a través de los cristales cerrados.
El acristalamiento de las terrazas tiene unas ventajas innegables a la comunidad. Las estructuras de una terraza acristalada se mantienen más secas y la disgregación del hormigón se detiene casi por completo. El acristalamiento protege también la puerta de la terraza, la ventana y la pared trasera. La temperatura en la terraza se mantiene todo el año superior a la del exterior, promoviendo el secado de las estructuras de hormigón. Según los estudios, el acristalamiento alarga hasta décadas la vida útil de las terrazas. Esto significa un importante ahorro de costes de mantenimiento y también los costes de calefacción en épocas frías.
Los cristales se adaptan a casi todas las estructuras de barandillas y terrazas. En muchas zonas de Europa los edificios nuevos ya vienen con terrazas acristaladas.
Los cristales para terrazas consta de dos perfiles de aluminio horizontales fijados a las estructuras del techo y a la barandilla o directamente al suelo de la terraza. Los perfiles sostienen hojas de vidrio templado de 6, 8 o 10 mm. de grosor que se deslizan y doblan hacia dentro. Para que un vidrio templado se rompa el golpe debe ser muy fuerte. En caso de romperse, se fragmenta en pedazos pequeños con cantos lisos, y no hay riesgos de heridas graves.
La primera hoja se abre por medio del cierre inferior y se puede bloquear en posición de ventilación. Las demás hojas se deslizan y se doblan. Cuando se doblan, las bisagras se van encajando unas con otras. De este modo, el sistema se puede abrir completamente. Los cristales para terrazas en forma de L o de U pueden pasar ángulos de +90º... -270º.
Las piezas de aluminio están pintadas, lacadas con polvo de poliéster. Los colores básicos son blanco y gris aunque también se pueden encargar otros tonos y anodizados. Las piezas plásticas son blancas o negras.
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