Ubicada en el centro de la ciudad, el proyecto surge para dar respuesta a una nueva clínica cuyos valores se basan en un trato extremadamente personalizado. El trazado del edificio de principios del pasado siglo condicionaba la distribución.
Se decide unificar el color de paredes, suelo y techo, empleando un pavimento continuo diseñado por el estudio. El tono de este material se aplica al lacado de los paneles de madera y a la pintura de las paredes, al solid surface de las encimeras, a las griferías, los pulsadores…etc. favoreciendo un ambiente que respondía a la idea de los propietarios.
Este tono gris oscuro contrasta de forma intencionada con los aparatos necesarios para los cuidados dentales, que se muestran, así como los elementos protagonistas de la actividad.
El espacio irregular se resuelve con el hall de entrada produciendo una interesante percepción del espacio.
Para más información visiten: Fran Silvestre Arquitectos
Vía: Infurma
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