Fran Silvestre Arquitectos nos explica,
El proyecto consiste en la materialización de unas oficinas de atención al publico. Se encuentran en un local en el centro de la ciudad con una geometría compleja, llena de giros y de elementos estructurales que interfieren en la comprensión del espacio.
Para ordenar este interior y hacer eficaz su funcionamiento, se regularizan los giros con geometrías ortogonales enlazadas. Se hace coincidir cada uno de los espacios regulares con una parte distinta del programa.
El proyecto consiste en la materialización de unas oficinas de atención al publico. Se encuentran en un local en el centro de la ciudad con una geometría compleja, llena de giros y de elementos estructurales que interfieren en la comprensión del espacio. 
Para ordenar este interior y hacer eficaz su funcionamiento, se regularizan los giros con geometrías ortogonales enlazadas. Se hace coincidir cada uno de los espacios regulares con una parte distinta del programa.
Cada estancia regular se encuentra definida y contrastada de las estancias colindantes mediante una tonalidad diferente que va desde el blanco, pasando por diferentes escalas de grises. Se convierten así los techos en una suerte de señalética que define los usos.
La iluminación indirecta ubicada en el techo refuerza esta idea y permite tener unas luminarias cuya longitud dan servicio a los puestos de trabajo. La actividad se concentra en los dos primeros metros de altura, el local se organiza y se desorganiza con el trabajo de cada día, mientras el techo permanece siempre ordenado.
En la secuencia de acceso unos muebles incorporan toda la tecnología e informan a las personas que esperan. Este mobiliario esconde en su interior la estructura del edificio existente. La escalera central une la zona de atención al público con los despachos de la planta superior. Mientras que el diseño unitario de la fachada con elementos horizontales de aluminio, ayuda a que las instalaciones puedan ventilar y hacer confortable el espacio. Así el local se transforma en una sorpresa llena de anamorfosis y efectos ópticos que nos ayudan a entender el funcionamiento de estas oficinas.
La iluminación indirecta ubicada en el techo refuerza esta idea y permite tener unas luminarias cuya longitud dan servicio a los puestos de trabajo. La actividad se concentra en los dos primeros metros de altura, el local se organiza y se desorganiza con el trabajo de cada día, mientras el techo permanece siempre ordenado. 
En la secuencia de acceso unos muebles incorporan toda la tecnología e informan a las personas que esperan. Este mobiliario esconde en su interior la estructura del edificio existente. La escalera central une la zona de atención al público con los despachos de la planta superior. Mientras que el diseño unitario de la fachada con elementos horizontales de aluminio, ayuda a que las instalaciones puedan ventilar y hacer confortable el espacio. Así el local se transforma en una sorpresa llena de anamorfosis y efectos ópticos que nos ayudan a entender el funcionamiento de estas oficinas.
Para más información visiten: Fran Silvestre Arquitectos
Vía: Infurma
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