

Todos los muebles fueros elegidos a escala, ligeros y fáciles de trasladar. Algunos de los muebles se camuflan, se esconden o se pliegan, para ahorrar espacio cuando no se usan. Al fondo, a la derecha, una habitación para invitados ocasionales, que nos reserva una sorpresa.
Las dos habitaciones están contiguas, y quedan camufladas por el panelado gris claro de la pared y una cortina de seda azul plomo.
Cuando se abren las puertas, sorprende el reducidísimo tamaño de ambas habitaciones, en especial, la de invitados, para la que se ha ingeniado una cama tipo “sarcófago”, con el fin de liberar la superficie durante el día.
La habitación se convierte en estudio o zona de lectura cuando está vacía. Aunque, desde luego, no es una solución para vivir de forma permanente, es una idea muy buena para que los invitados ocasionales no duerman en el sofá.
El dormitorio principal está diseñado con la funcionalidad de un camarote de barco, con todos los elementos empotrados y superficies lisas, para evitar aristas y salientes.

Siempre nos gusta incluir los planos de esta viviendas pequeñas, pues creemos que pueden ser de utilidad a la hora de organizar un espacio. En el plano se ve con claridad que, a pesar de la escasez de los metros, la vivienda cuenta con generosos armarios. Lo decimos siempre: los metros no son una excusa.
Para más información visiten: Gosplan
Fotografías: Anna Positano
Vía: decoratrix
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