Estar ubicado en la calle París tiene que marcar. Quizá esa haya sido la inspiración de Futur2 para reconvertir un antiguo cine en un local con aires de película. En el Club Astoria de Barcelona se respira la tradición del cabaret parisino. Y, por aquello de las referencias cinematográficas, casi se podría decir que es una recreación del primer Moulin Rouge. Por cierto, un local construido en el año 1889 por el catalán Josep Oller. Y es que las referencias crecen a cada paso que damos dentro de este espacio.
La sala respira referencias artísticas de las vanguardias del siglo XX y, al mismo tiempo, evoca el ambiente bohemio de la Belle Epoque, integrando con aciertos elementos contemporáneos como la barra central iluminada que no desentona del conjunto. Esta es la línea estética que ha marcado la reconversión de un gran cine de los años 70, ubicado en el centro de Barcelona, es un restaurante-club, con la intención de alargar la noche.La rehabilitación del cine ha generado un espacio multifuncional respetando el anfiteatro, la platea y el escenario, que se convierte en uno de los atractivos del local. Cene con espectáculo y copas. Eso sí, sin olvidar un híbrido de géneros y tendencias, una atmósfera envolvente que fusiona gastronomía y decoración.
El Club Astoria no escatima en color ni en espacio. Tonos eléctricos que alternan con la iluminación de las barras, asientos demodé, butacas y taburetes, sillones con aire decimonónico y kitsch, etc. Un espacio central diáfano que alterna sinuosos recorridos en su perímetro que genera espacios íntimos que garantizan recogimiento y permiten una mixtura de formas y complementos, referencia de los locales de nuevo cuño.
Además, la altura de los techos del Club Astoria favorece la magnificencia del local. De ellos cuelgan grandes lámparas decorativas y, en ellos, se juega con el color aprovechando el contraste de sus versiones más eléctricas con lo recargado de la decoración base del local.
Un acierto Futur2, un estudio multidisciplinar con más de 20 años de trayectoria, en el que se mezclan raíces escenográficas del mundo del cine y el teatro, con una tendencia más conceptual de locales comerciales, nocturnos y restauración.
Vía: diarioDESIGN
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