miércoles, 28 de marzo de 2012

Eliminar las manchas de humo de la pared

Eliminar las manchas de humo de una pared exige cubrirlas con una pintura especial, mientras que en una chimenea es posible limpiarlas con amoniaco.

Las manchas de humo, en general, son muy difíciles de limpiar. Cuando se ensucia la pared, lo más aconsejable es lijar y recubrir la superficie con pintura antimanchas, también llamada tixotrópica. En otros casos, como en el interior de las chimeneas, es posible quitarlas con amoniaco, aunque esta es una zona poco visible y, con el tiempo y el uso, las manchas se formarán de nuevo.



Las manchas de humo, difíciles de limpiar

El humo genera sobre las superficies manchas que, en muchos casos, son difíciles de quitar. El método más adecuado dependerá del tipo de superficie sobre el que se ha generado la mancha. Si son áreas destinadas a recibir la incidencia del fuego, como el interior de las chimeneas, bastará una buena limpieza con una relativa frecuencia, ya que no es un lugar muy visible y, con el tiempo, la mancha se formará de nuevo. Si de forma ocasional la superficie afectada por las llamas es una pared, corresponderá obrar de otra manera para solucionar el problema.

Las manchas de humo en el interior de las chimeneas son muy difíciles de quitar, ya que a las partículas de suciedad se añade el efecto ennegrecedor del calor. Además, si la chimenea que se desea limpiar está protegida por una campana de cristal, el humo oscurecerá su aspecto con frecuencia, por lo que será necesario limpiarla con asiduidad.

Manchas de humo en la pared

Las manchas de humo en la pared se forman, en general, por algún pequeño descuido, como una vela encendida muy cerca de la pared, o bien por un pequeño incendio. Estas manchas son muy difíciles de limpiar, pero hay maneras de remediarlas.

Lo primero será examinar el tipo de pintura que recubre la pared. Si es lavable, habrá que limpiar la superficie del modo más exhaustivo posible. Para ello, se puede utilizar amoniaco u otras sustancias abrasivas que se comercializan en el mercado. Si no es lavable, los intentos de limpieza podrían tener como único resultado dispersar la suciedad y hacer que la mancha aumente de tamaño.

En cualquier caso, después hay que lijar la pared. La profundidad del lijado y el número de pasadas necesario dependerán de la mancha: a mayor suciedad, más trabajo exigirá. Después se ha de aplicar pintura tixotrópica o antimanchas, creada con el fin específico de cubrir y eliminar la suciedad. A diferencia de las pinturas convencionales, la tixotrópica no permite que con el paso del tiempo las manchas se formen de nuevo y, no solo oculta las manchas de humo, sino también las de humedad, grasa, nicotina, hollín, óxido, aceite, café, bolígrafo y rotulador.

Amoniaco para manchas en las chimeneas

Para las manchas de humo en chimeneas, el alcohol no resulta un limpiador eficaz. El producto por lo general más adecuado es el amoniaco, que debe emplearse casi sin rebajar. Hay que pulverizar el líquido sobre la superficie ennegrecida y dejar que actúe durante unos minutos. Luego se retiran los restos con un estropajo suave para evitar que el cristal se raye.

El uso de amoniaco exige tomar ciertas precauciones, debido a que puede ocasionar irritación o problemas más graves en el cuerpo humano si entra en contacto con él, ya sea en estado líquido o gaseoso (si se inhala). Cuando se emplee esta sustancia, conviene abrir bien las ventanas y, si se quieren extremar las precauciones, usar una mascarilla.

Si tras el uso de amoniaco la mancha persiste, la opción es recurrir a productos más potentes, específicos para borrar este tipo de manchas. Estas sustancias también eliminan incrustaciones de alquitranes, grasas carbonizadas o resinas en áreas que estén en contacto con el fuego o el humo.

Pintura contra las manchas de humo

La pintura tixotrópica tiene una textura similar al gel, pero pasa a estado líquido cuando se agita. Otras ventajas de este producto son: es transpirable -lo cual le permite adaptarse sin problemas a diversas condiciones de humedad ambiental-, en general basta con aplicar una sola capa y se utiliza sobre una gran variedad de materiales, como pintura,cemento, yeso, escayola, hormigón, e incluso, plástico y papel pintado.

Vía: Eroski Consumer

No hay comentarios:

Publicar un comentario