Ópalo es el nombre de esta zapatería que lleva más de ocho años de funcionamiento en la referida ciudad medieval. Sus propietarios han adquirido en propiedad un nuevo local y, aprovechando el cambio de ubicación, se decidieron por dar un cambio de imagen a la tienda.
De este cambio de imagen se encargó Alapar Estudio, a quienes los propietarios encargaron el proyecto de reforma. Para su diseño optaron por crear una boutique fresca y delicada centrada en devolver el protagonismo al producto.
Claves de la reforma
El estudio decidió respetar algunos elementos que ya se encontraban en el espacio como los espejos de la pared, que consiguen dar carácter al espacio a la vez que ayudan a ampliarlo y a crear verticalidad visual.
Los espejos, con forma de media circunferencia en su parte superior, sirvieron de guía al estudio que optaron por aplicar el mismo recurso en el paso de acceso al almacén para no romper el ritmo, haciendo del arco uno de los elementos decorativos claves en el espacio.
Como el local solo cuenta con solo 21 m2, se trabajaron las alturas de las paredes para mostrar la mayor cantidad de producto posible de una manera ordenada a través de estanterías blancas y un mueble bajo a medida blanco y dorado, que sirve de almacenamiento y probador.
Claves de la reforma
El estudio decidió respetar algunos elementos que ya se encontraban en el espacio como los espejos de la pared, que consiguen dar carácter al espacio a la vez que ayudan a ampliarlo y a crear verticalidad visual.
Los espejos, con forma de media circunferencia en su parte superior, sirvieron de guía al estudio que optaron por aplicar el mismo recurso en el paso de acceso al almacén para no romper el ritmo, haciendo del arco uno de los elementos decorativos claves en el espacio.
Como el local solo cuenta con solo 21 m2, se trabajaron las alturas de las paredes para mostrar la mayor cantidad de producto posible de una manera ordenada a través de estanterías blancas y un mueble bajo a medida blanco y dorado, que sirve de almacenamiento y probador.
En cuanto a los revestimientos y acabados, la pintura rosa de las paredes zonifica el espacio de mostrador y de la exposición, transmite feminidad y delicadeza.
Por otro lado, se ha usado el gris en el suelo con un pavimento de gran formato, que da sensación de amplitud al espacio. La cortina del almacén es del mismo tono para que suelo y pared parezcan fusionarse.
También encontramos el gris, a tono con el suelo en los taburetes de terciopelo que, sobre una base dorada potencian la imagen de boutique femenina y afrancesada.
Para más información visiten: Alapar Estudio
Vía: Decoesfera
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