Excepto por el inodoro, todos los espacios están conectados. Dos recintos adicionales se abren al espacio conectado principal. Creemos que hay comportamientos públicos y comportamientos privados en una casa. Estos dos recintos desempeñan el papel de un conector suave.
El nivel inferior del recinto blanco es un dormitorio con una atmósfera escondida, íntima por un nivel del suelo 50 mm más bajo que la sala de estar. El nivel superior es el espacio para niños con acceso por una escalera, especial para ellos gracias a la altura y escala del techo bajo.
Los pisos de madera rodean el recinto de madera, y las líneas en ángulo continúan en la pared. Este lugar contiene los espacios de baño, lavabo y espacio de aseo, con grandes aberturas hacia la sala de estar. Las cortinas blancas son el único material suave, instalado para la privacidad. Visto desde la sala de estar, el interior de este recinto aparece como un marco tridimensional. La bañera y la ducha de lluvia están en el centro del escenario, iluminadas por el respaldo de azulejos hexagonales blancos.
En el corazón de la sala de estar hay una mesa de 4,5 m de largo, hecha de cedro japonés (sugi). Esta mesa central alberga muchas funciones, tales como cocina, comedor, espacio de trabajo y espacio de dibujo para niños. La tabla no está dividida por funciones, sino que las conecta suavemente. Las situaciones familiares cotidianas tienen lugar aquí, y cuando las personas se reúnen para fiestas, esto se transforma en una mesa común de 20 asientos.
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