Papeleras y cubos de basura con un toque de diseño

No hay rincón u objeto dentro de una casa susceptible de ser rediseñado, modificado o mejorado cuando pasa por las manos de un diseñador. Como sabemos que cada detalle cuenta, no podemos pasar por alto ni los cubos de basura. Así a ellos, y a las papeleras, va dedicado nuestro post.

Si nos preocupamos por elegir el color adecuado para las paredes, que éstas a su vez combinen con las cortinas y los cojines y además gastamos tiempo eligiendo complementos como velas y portafotos, ¿por qué no podemos dedicar algo de tiempo a nuestro rincón de reciclaje?

Las papeleras obviamente suelen estar visibles y cercanas al escritorio dentro del despacho y a mano cuando las colocamos en el baño.

Sin embargo, a los cubos de basura se les suele buscar hueco dentro de uno de los muebles de cocina, generalmente bajo el fregadero. Pero no siempre es posible, especialmente en las cocinas pequeñas.

Así que si nuestra papelera y nuestro cubo de basura han de estar visibles, no queda otra que buscar un modelo que encaje funcional y estéticamente.

Les hemos preparado una selección de los distintos modelos por los que podemos optar.

Cubos dentro de un mueble

Si tenemos suficiente espacio en la cocina, lo ideal es que los cubos vayan dentro de un mueble, a poder ser con todo el espacio disponible para poder contar con al menos dos compartimentos. Podemos optar por un sistema de extracción manual o bien que éstos salgan al mismo tiempo que abrimos la puerta.

Con tapa en la encimera

Este sistema suele verse en cocinas con isla; siendo en ésta donde se hace un agujero en la encimera -con una tapa de acero o incluso del mismo material- que conecta directamente con el cubo.

Resulta muy práctico como apoyo a la zona de trabajo, pudiendo arrastrar los restos de comida con la mano. Para envases y envoltorios más grandes siempre será más cómodo acceder al cubo con el sistema tradicional.

Cubos exentos

Y llegamos al punto en el que nos obligamos a sacar el punto de reciclaje fuera del mueble. Bien porque necesitamos todos los muebles de cocina para almacenaje, o bien porque aún teniendo el cubo oculto, es necesario añadir un cubo más. Algo que suele ocurrir en las viviendas de familias numerosas, donde los cubos se quedan escasos.

Cubos apilables

Una vez fuera del mueble, podemos encontrar cubos apilables. Éstos siempre ocuparán menos espacio al crear una columna. Suelen tener una forma que permite dejar una abertura en su parte externa por la que verter los desechos. Son perfectos para espacios pequeños y casas con pocos miembros en la familia.

Con patas

Si nos hemos gastado un buen dinero en la cocina y ésta nos ha quedado de lujo, no nos podemos relajar con nuestro cubo de basura exento.

Sabemos que los hay cilíndricos con un diseño muy neutral, pero si queremos salirnos de la norma, un cubo con forma rectangular, que quede pegado a la pared o al lateral de un mueble, y que tenga unas patas ligeramente inclinadas, y un color acorde al resto de la estancia, siempre será una buena alternativa.

No sólo son bonitos, también son más prácticos por estar más altos, algo que agradecerán las personas con dolores de espalda que no tendrán que agacharse tanto.

De colores

Y si nos ha encantado la idea de tener un cubo de basura de diseño y queremos darle más protagonismo, un poco de color nos ayudará a enfatizarlo y hasta, por qué no, convertirlo en elemento más bonito de la cocina.

Papeleras de baño y despacho

Y por último, no queremos olvidarnos de las papeleras. Éstas suelen estar destinadas al despacho, ubicadas junto al escritorio en un lugar bien visible, así que una buena idea es escoger un material y color acorde con el resto del mobiliario y complementos. Por ejemplo con una tapa de madera a juego las patas de la mesa y la silla.

En el baño ocurre lo mismo. No es fácil ni práctico ocultarlas, así que ya que deben estar presentes, podemos optar por una papelera a juego con los azulejos u otros accesorios como toalleros o jaboneras.

Vía: Decofilia