Y es que el diseño de farmacias, como en su momento pasó con los bancos, hasta ahora ha venido siendo bastante homogéneo y anodino, muy poco dado a la originalidad y el marketing. Quizás por el tipo de producto dispensado (relacionado con la salud y por tanto un producto “serio”), parece que no casaba con opciones creativas y diferentes a la hora de decorar este tipo de locales. Sin embargo, parece que de un tiempo a esta parte el diseño por fin ha entrado en este tipo de establecimientos, como podrán comprobar en este ramillete de ejemplos seleccionados para mostrarles las infinitas posibilidades para decorar estos espacios y convertirlos en auténticas farmacias de diseño.
A continuación les resumimos los diferentes conceptos que se han empleado en la imágenes que hemos seleccionado:
Blanco como base: empleado tanto en suelos como en techos, paredes y todo tipo de mobiliario, con la idea de que sean los propios productos los que den el toque de color y sean parte activa de la decoración. También es factible introducir algún material con un color suave (arenas o grises claros) para suavizar el impacto que produce el blanco en todo el espacio y evitar el “efecto hospital”.
Futurista: si a la opción anterior le sumamos muebles de formas redondeadas, lacas y brillos e iluminación blanca o azul, lo más probable es que el resultado nos parezca cuanto menos del próximo siglo.
Color: Al contrario que las versiones anteriores, el uso de tonalidades alegres y vivas en fotografías, vinilos, paredes o mobiliario aportará mayor cercanía. Generalmente suele ser más aceptado por los clientes, al sentir estos espacios más cercanos y menos fríos.
Color: Al contrario que las versiones anteriores, el uso de tonalidades alegres y vivas en fotografías, vinilos, paredes o mobiliario aportará mayor cercanía. Generalmente suele ser más aceptado por los clientes, al sentir estos espacios más cercanos y menos fríos.
Calidez de la madera: como material siempre resulta muy agradecido: en cualquier espacio será el encargado de dar el toque acogedor aunque sea empleado en pocas cantidades. El uso de la madera en algunos muebles y en combinación con otros elementos más modernos dará como resultado un espacio cálido y moderno a un mismo tiempo.
Volúmenes: ya sean suspendidos del techo para enfatizar los expositores que pueda haber bajo ellos, que nazcan de las columnas a modo de baldas o bien que enmarquen las estanterías de las paredes. Es una fórmula eficaz para diseñar cualquier tipo de espacios.
Mostradores: en cualquier comercio el mostrador siempre supone un elemento de diseño, el punto de encuentro entre cliente y vendedor. Por lo tanto es importante que sea pensado al detalle. En las fotos de decoración de farmacias que acompañan a este artículo los hay con forma de cruz e iluminados, con divisiones de vidrio tintado para atender a varios clientes a un mismo tiempo creando filas diferenciadas, con desniveles en altura y el logotipo del local grabado, con una base rectangular que emite luz, y hasta con forma de cilindro.
Expositores: ocupan gran parte de la farmacia, así que es importante prestarles atención. Dan mucho juego a la hora de decorar el espacio ya que lo más probable es que ocupen todas las paredes, así como la zona central del establecimiento. Pueden ser diseñados a modo de cuadrícula y de suelo a techo, rodeando las columnas que pueda haber en el local, o bien utilizar diferentes materiales y colores para crear un ritmo de diseño.
Toque distintivo: en cualquier local, si queremos que el cliente recuerde el espacio y vuelva a visitarlo, una de las formas es incorporar elementos que los distingan de la competencia, por ejemplo con vinilos decorativos en el techo o adoquín en el suelo.
Volúmenes: ya sean suspendidos del techo para enfatizar los expositores que pueda haber bajo ellos, que nazcan de las columnas a modo de baldas o bien que enmarquen las estanterías de las paredes. Es una fórmula eficaz para diseñar cualquier tipo de espacios.
Mostradores: en cualquier comercio el mostrador siempre supone un elemento de diseño, el punto de encuentro entre cliente y vendedor. Por lo tanto es importante que sea pensado al detalle. En las fotos de decoración de farmacias que acompañan a este artículo los hay con forma de cruz e iluminados, con divisiones de vidrio tintado para atender a varios clientes a un mismo tiempo creando filas diferenciadas, con desniveles en altura y el logotipo del local grabado, con una base rectangular que emite luz, y hasta con forma de cilindro.
Expositores: ocupan gran parte de la farmacia, así que es importante prestarles atención. Dan mucho juego a la hora de decorar el espacio ya que lo más probable es que ocupen todas las paredes, así como la zona central del establecimiento. Pueden ser diseñados a modo de cuadrícula y de suelo a techo, rodeando las columnas que pueda haber en el local, o bien utilizar diferentes materiales y colores para crear un ritmo de diseño.
Toque distintivo: en cualquier local, si queremos que el cliente recuerde el espacio y vuelva a visitarlo, una de las formas es incorporar elementos que los distingan de la competencia, por ejemplo con vinilos decorativos en el techo o adoquín en el suelo.
Toque vintage: no podía faltar el estilo de moda, apto para cualquier espacio, ya sea vivienda o local y siempre al gusto de todos. En las farmacias, también supone un toque de diseño ya que la decoración trae aires nuevos al concepto de estos locales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario