Además de los muebles antiguos repartidos por toda casa (incluyendo los baños), el piso muestra el encanto de su estructura original con los techos de bóveda catalana vistos pintados de blanco y unas carpintearas reformadas pero con un color verde menta que recuerdan el estilo de las ventanas originales del edificio.
La transformación (reforma y decoración incluidas) de este piso es obra de The Room Studio, el estudio de interiorismo formado por Meritxell Ribé y Josep Puigdomènech.
Para atender las necesidades de los clientes éstos plantearon una nueva distribución del inmueble que cubriera las demandas de sus propietarios que querían una casa para disfrutar y vivirla en su totalidad, con zonas comunes amplias y comunicadas entre ellas.
LA ZONA DE DÍA
La zonas comunes o de día incluyen un salón, una cocina con office y barra de desayuno, un comedor más formal y una una terraza que están situadas en un gran espacio rectangular, separados con paredes pero con grandes grandes aperturas en ellas que permiten conectar física y visualmente todos estos espacios comunes.
La selección de los materiales y de cada mueble fue minuciosa para conseguir crear este ambiente muy cálido y especial gracias en gran parte a esta mezcla de mobiliario antiguo con piezas más contemporáneos y actuales.
La elección del parqué y de los azulejos del suelo de marcado carácter clásico encaja muy bien con los techos de bovedillas y los muebles de carácter antiguos.
La zona de noche se encuentra orientada en el lado opuesto de la casa, donde se ha creado un ambiente más recogido y tranquilo.
Cada habitación ha sido diseñada siguiendo las premisas de los propietarios y están equipadas con elementos confortables y ergonómicos. La integración de distintas piezas de anticuario permite potenciar la arquitectura original de la vivienda. También se ha incluido obras de arte a este espacio que completan la decoración escogida y que aportan valor a todo el conjunto.
En la habitación principal se ha buscado la comodidad y serenidad. En tonos verdes (que se encuentran en la casa en distintos matices), es un dormitorio confortable que está precedido de una zona de vestidor con baño romántica e industrial al mismo tiempo.
La altura de los techos y el diseño de los armarios marcan el carácter de esta estancia.
La zona de lavabo del baño principal se apoya sobre unas cristaleras originales del inmueble. Como mueble de lavabo se ha usado un mueble de oficio antiguo y como lavabos, unas pilas que parecen pilas antiguas lo que refuerza el carácter de este espacio que le traslada a otra época.
Mención especial también merecen el dormitorio infantil. En lugar de usar dos cuartos (en esta caso no había problemas de espacio) se ha optado por un gran cuarto infantil con espacio para todo; dormir, jugar y estudiar en zonas unidas pero bien diferenciadas. De inconfundible carácter romántico gracias al papel pintado y los tonos pastel de textiles y accesorios, en esta estancia se mezclan muebles de Ikea, como la librería, con otros a medida como las camas en hilera.
Por último, el baño infantil también guarda una agradable sorpresa en forma de consola recuperada con motivos florales como lavabo.
El efecto es pura magia...
Para más información visiten: The Room Studio
Vía: Decoesfera
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