La pared se caracteriza por un diseño donde tierras de diversos tonos se apilaron para hacer que parezca que fueron cortados y escalonados, tomando como motivo las tartas heladas hechas por capas de helados de varios sabores y después cortándolos en rebanadas. La pared guía a la gente hacia la tienda por la suave curvatura de la pared exterior, y luego crea un suave efecto envolvente, como el helado derretido, hasta el fondo de la tienda. Esto creó un ambiente relajante, aprovechando la compacidad del espacio.
Dado que la tienda contigua existente hacía un amplio uso de iluminación brillante con el blanco como su color base, y material duro como mármoles y metal, esta tienda en contraste utiliza conceptos tenues de colores e iluminación, con tierras y madera que proporcionan una sensación de suavidad, por tanto se diferencian las dos tiendas y amplia la visión del mundo de la marca en general.
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Vía: Infurma
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