Saboc es un nuevo espacio gastronómico situado junto a la Plaça Comercial, el nuevo epicentro del Born barcelonés que preside majestuosamente el rehabilitado mercado de abastos El Born Centre Cultural. En este recuperado entorno, Saboc busca recrear el placer de vivir de los años 50 con un estilo nórdico definido por la sencillez y el ambiente cálido.
En un lugar en el que el máximo protagonismo debe ser para los platos que se sirven, los arquitectos Juan Carlos Fernández, Adam Bresnick y Reyes Castellano, con la colaboración de Antonio Romeo y Miguel Peña, han creado un local despojado de añadidos y elementos superfluos: dejando el ladrillo y sillares de piedra vistos, el primero igualado con un mano de pintura gris cálido con matices verdes, creando un contenedor uniforme.
Se ha escogido mobiliario de la firma danesa Hay, en el que las líneas suaves y los materiales nobles están muy presentes y una tapicería en un amarillo ocre da un toque de color representativo al restaurante, que nos lleva a un universo de colores de los años 50 nórdicos. El mobiliario fijo está hecho de tablero de contrachapado fenólico con una veladura en blanco que suaviza el conjunto.
La iluminación es puntual, con lámparas colgantes de la firma también danesa Lightyears. Se ha creado un sistema de guías que permite mover las luminarias colgantes con las mesas, para que siempre queden centradas en la mesa. La iluminación indirecta y tapicería en grises cálidos consiguen crear un ambiente acogedor.
El suelo es un elemento esencial de Saboc: ha recuperado el mosaico hidráulico utilizado a mediados del siglo XIX, en forma hexagonal que recuerda a las baldosas del Passeig de Gracia y combinando distintos tonos de grises.
Pero por supuesto, la comida es la estrella del lugar. El equipo de Saboc ha ideado un menú basado en cuatro tipos de cocción: cruda, a baja temperatura, con fogones y a la plancha. Los alimentos cambian radicalmente su sabor y textura según la temperatura y el tipo de cocción y la propuesta de Saboc es que sus clientes experimenten y disfruten de las diferencias. Por ello, la intervención y acondicionamiento la acompaña y no compite con ella.
Los platos, protagonistas como ya se ha comentado, son siempre blancos y combinan 2 ó 3 sabores. “Son platos minimalistas para saltar de uno a otro”, explican desde la cocina.
Para más información visiten: Saboc, Juan Carlos Fernández Arquitectura+Interiores, Hay
Vía: diarioDESIGN
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