Aunque al hablar de muebles a todos se nos viene la madera a la cabeza, lo cierto es que existen otros materiales que pueden emplearse en la elaboración de piezas de mobiliario. Uno de los más utilizados es el hierro, que se adapta perfectamente a todas las estancias del hogar y a diferentes estilos decorativos.
Pero la versatilidad no es la única ventaja del hierro. Este material es muy duradero y prácticamente no necesita mantenimiento. Los muebles realizados en hierro suelen presentar líneas delgadas y de apariencia ligera y son una buena inversión a largo plazo.
Mantenimiento de los muebles de hierro
Para que los muebles de hierro se conserven durante mucho tiempo, es necesario dotarles de un tratamiento inicial que los proteja de la humedad si se van a ubicar en espacios exteriores o en habitaciones con mucha condensación, como la cocina o el baño. De esta manera se evita que se oxiden y que se tenga que aplicar algún tipo de tratamiento para restaurarlos.
En todas las estancias
Como te acabamos de comentar, los muebles de hierro quedan bien en todas las estancias de la casa, aportándoles un toque de rusticidad y/o elegancia. Por ejemplo, en el salón el hierro puede ser el protagonista de una mesa de centro o de algún que otro asiento.
El hierro también puede ser el material estrella del dormitorio a través de la pieza más importante de esta estancia: la cama. Toda la estructura de este mueble puede estar conformada por este material o simplemente, puede utilizarse el hierro solo para el cabecero. Además, puede emplearse para realizar estanterías u otros muebles similares en estancias como la cocina (carritos, organizadores….), el recibidor (espejos, colgadores…), o el baño (estanterías, soportes para los sanitarios…).
Muebles de exterior
Por último, no podemos olvidarnos del protagonismo del hierro en el mobiliario exterior, siendo uno de los materiales más utilizados para estos espacios. En terrazas, jardines y patios quedan geniales los juegos de mesas y sillas fabricados con este material, aunque también pueden utilizarse en esquineros o estantes para colocar macetas.
Vía: Interiorismos
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